SEUDO Número Cinco | Page 8

Hoy ya es miércoles 14 de noviembre y son las 18:15. La gran estampida estaba planeada para las 18:30. Cada ciudadano, en cada una de las ciudades, estaba plantado detrás de su reja del frente; los que no tenían frente, se atrincheraron detrás de las puertas. Ya son las 18:25. Me siento afligido por el acontecimiento, la sangre me tiembla, mis ojos se mueven deprisa y un tic infernal se apodero de mis piernas.

Estoy arriba de un árbol, esperando. Observo a los callejeros rondar las plazas, caminar lento y distendido por las calles, sin mutarse, aparentemente, del acontecimiento.

Estoy ansioso y deprimido, pienso en el fin de la especie, en mi fin, en el dolor.

Me atormenta el aparente desconcierto de los callejeros, su vulnerabilidad.

Son las 18:28 y no soporto más.

Les grito - ¡¡sí, esto es por el amor!!. - ¡¡Guarda!! ¡¡Corran por sus vidas!! ¡¡Ahí vienen!!.

Y como la voz de un dios, mi voz se abrió paso por entre las ramas y las hojas.

Tendrían que haberlo visto! Todos corriendo como salidos de un hormiguero pisado. Los callejeros gritando la advertencia a todos los pares que se cruzaban en el camino, se codeaban, parecía una competencia de posta.

Mientras que los ciudadanos los corrían, desesperados, enajenados, enfermos.

Todos con sus utensilios y herramientas en la mano.

Parece estar todo terminado, pensé. Pero no, de pronto me acorde de un detalle.

Sí! Los infiltrados, los actores; sí, ellos.

Y sin poder terminar de razonar, veo desde el horizonte, puñados de ellos, junto a millares de los otros, callejeros. La escena es fantástica; pero triste, una guerra triste.

Y esa era la escena, así pude acomodar las fichas en el tablero, razonando.

Ellos, los ciudadanos se habían olvidado de dos gravísimos detalles:

1- Del papel traicionero, consiente, descarado, pero humano que tienen los actores, los infiltrados, esos que no respetan la ley.

2- El destino terrenal, de supervivencia que tienen los callejeros; que gracias a los números, esos de cantidad, formaron tanta masa y fuerza que ganaron la batalla final.

TRES

MARCIANO

"Si te dan un papel pautado, escribe por detrás" - Higeniol