Serie "Cuerpo, Alma y Ruaj" Serie Cuerpo, Alma y Ruaj | Page 48

son puertas que han sido abiertas a un reino extraño al
que ahora reina. ESAS PUERTAS DEBEN SER CERRADAS
OFICIALMENTE.
Nuevamente repito: los demonios ya no tienen poder
oficial de entrar, PERO AÚN ASÍ INCOMODAN FUERTE-
MENTE, y eso es algo que nadie puede negar porque lo
ven en sus propias vidas o en las vidas de otros herma-
nos, creyentes todos. Si esto es así no es por una falla
del Ruaj, SINO POR UNA FALLA NUESTRA, y es bastante
simple de reparar, pero nadie la hace, de forma que
continúan avanzando cargando con todos los problemas
psicológicos que mencionamos arriba (en vez de des-
hacerse de ellos porque ya no les pertenecen) y
además dejando el acceso para que los demonios pue-
dan perturbarlos por lo menos con sus gritos (y como el
alma les cree...).
Luego que la persona entrega su vida al Mashíaj, quiere
hacer la voluntad de Yahweh. A pesar de eso, el con-
tacto con el reino de haSatán continúa, porque él no
renuncia voluntariamente al territorio que se le ha en-
tregado al establecer contacto con su reino.
Así, por ejemplo, cuando esta persona trata de leer la
Biblia u orar le es muy difícil concentrarse en lo que
está haciendo; siente pereza de ir a las reuniones, o en
orar. Muchas veces duda del amor de Yahweh, o piensa
que Yahweh le miente o no cumple sus promesas, o que
lo maltrata innecesariamente. Mientras el contacto que
hicimos con el reino de HaSatán no sea OFICIALMENTE
QUEBRADO, la relación con el mundo sobrenatural será
como una conversación telefónica con las líneas cruza-
das cuando cuatro personas tratan de hablar a la vez.
Nadie entiende nada. Cuando la persona renuncia al
contacto que tuvo con el ocultismo y cierra la puerta
que se abrió en su vida para comunicarse con haSatán,
el contacto con el reino de haSatán queda roto.
Hay personas que dicen: "Sí, yo fui a un lugar de estos,
pero yo realmente no creía en eso. Solamente acom-
pañé a una amiga". La Biblia nos dice que haSatán es
como un ladrón. Ningún ladrón espera para entrar en la
casa hasta que el dueño se dé cuenta de que lo es. Un
ladrón nunca llama a la puerta diciendo: "Yo soy
ladrón, permítame entrar, quiero robarle". Un ladrón
así se morirá de hambre. El ladrón entra cuando el
dueño piensa que la puerta o la ventana están bien ce-
rradas y cuando él menos lo espera. Así pasa con
haSatán; no espera hasta que le invitemos, para poner-
se en contacto con nosotros, él llega cuando menos lo
esperamos y menos creemos en él.
Tenemos la necesidad no solamente de arrepentirnos
de cada contacto con cualquier clase de espiritismo,
sino de renunciar a cada contacto que uno haya tenido
y cerrar la puerta que fue abierta a haSatán en la vida
de la persona.
¿Han tenido algún contacto directo con ocultismo? ¿Lo
han tenido sus padres o sus abuelos? La Biblia nos dice
en Éxodo 20:5 que estas influencias pueden seguir has-
ta la tercera o cuarta generación. Ahora mismo agre-
guen a su lista, cualquier contacto que hayan tenido
con el ocultismo. Escriban también todo lo que sepan
en cuanto a cualquier contacto que sus padres o abue-
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los hayan hecho, o lo que ustedes mismos hayan hecho
con sus hijos, Y SI NO SABEN SI SUS ANTEPASADOS HAN
HECHO ALGO (la mayoría de nosotros no tenemos idea,
obviamente, a menos que provengamos de una familia
claramente satanista) CIERREN "TODA PUERTA ABIERTA
SIN SU CONSENTIMIENTO" QUE PUEDA ESTAR ACTUAL-
MENTE AFECTÁNDOLOS A USTEDES O A SUS HIJOS.
No te postrarás ante ellas ni les servirás. Por-
que yo Yahweh tu Elohim soy un Elohim celoso,
que castigo la culpa de los padres sobre los
hijos, sobre la tercera y la cuarta generación
de los que me rechazan, Shemot/Éxodo 20:5
A pesar de que podemos resultar afectados por alguna
acción realizada por nuestros padres (por ejemplo, en
ciertos rituales las personas son "ofrecidas", y aunque
la mayoría sólo consiga pensar en rituales satánicos, la
consagración a ídolos como los católicos también está
incluida, aunque esta parte la mayoría puede conside-
rarla como algo de menor importancia), lo cierto es
que sólo nosotros podemos entregarnos a nosotros
mismos. NADIE PUEDE ENTREGARNOS A MENOS QUE NO-
SOTROS LO ACEPTEMOS VOLUNTARIAMENTE. Algunos lo
aceptan como un hado inevitable, como una maldición
que no puede ser quebrada, pero la verdad es que si un
padre ofrece a su hijo a los demonios, ESE PROPIO HIJO
DEBERÁ CONFIRMAR SU SUMISIÓN, O NO HABRÁ OFERTA
VÁLIDA. Normalmente lo hará porque ha sido convenci-
do de que nada lo librará de eso, y muchos pueden te-
ner conocimiento de cómo algunas personas se niegan a
aceptar a Yahshua porque NO CONSIGUEN SIMPLEMENTE
CREER QUE PUEDA HACER ALGO PARA LIBERARLOS. Esto
se debe a estas fuertes ataduras, que es necesario
quebrar antes de poder avanzar, pero que la propia
persona puede romper PORQUE LA SANGRE ES LO MÁS
PODEROSO QUE HAY.
Entregando TODO A Mashíaj
Si queremos que Yahshua sane nuestras heridas psi-
cológicas, en primer lugar tenemos que dejar que Él
entre en nuestras vidas. Quiero que perciban que con-
tinúo hablando con ustedes, QUE SON CREYENTES. Mu-
chos (no puedo decir que todos, porque no los conozco
personalmente, pero sería bueno que hicieran una pau-
sa y le preguntaran al Ruaj DÓNDE ESTÁN USTEDES, pa-
ra que si acaso están en mal lugar, se muevan rápida-
mente adonde Él quiere que estén) han aceptado a
Yahshua como su Salvador, pero muy pocos lo han
aceptado como SU CABEZA. Que Yahshua sea nuestro
Cabeza quiere decir que Su Ruaj gobierna nuestro ruaj.
Esto puede resultar fácil de decir y hasta parecer una
obviedad, PERO EN LA PRÁCTICA REAL NO TODOS LO
HAN HECHO. De hecho, la falta de frutos de muchos y
su estancamiento prueba que no lo han hecho, o que
tal vez algunas áreas permanezcan restringidas a Su en-
trada.
Él es siempre un caballero: ESPERARÁ A QUE NOSOTROS
LE ABRAMOS LA PUERTA PARA ENTRAR, pero debemos
recordar que mientras no la abrimos, él continúa afue-
ra, golpeando.