24
SANGUINARIA / SALA DE TERROR
TÍTULO ORIGINAL: The Monkey´s Paw
AÑO: 2013
DURACIÓN: 90 min.
PAÍS: Estados Unidos
DIRECTOR: Brett Simmons
GUIÓN: Macon Blair.
REPARTO: Adella Gautier, Andy Favreau, C.J. Thomason, Charles S. Dutton, Corbin Bleu, Daniel Hugh Kelly....
MÚSICA: Bobby Tahouri
GÉNERO: Terror, Thriller
Sinopsis
El joven Jake Tilton consigue un amuleto de “pata de mono” a través de un compañero de trabajo. Supuestamente ha de pedir tres deseos que se le concederán al instante. Pero los deseos de Jake se cumplirán arrastrando consecuencias terroríficas y terribles muertes en su entorno.
PASANDO EL MONO
Brett Simmons, hasta que se demuestre lo contrario, parece ubicarse entre esa hornada de realizadores de nueva generación que conocen a pies juntillas como trabajar con funcionalidad y cierto estilo los subgéneros del Cine Fantástico. Hace un par de años, se daba a conocer con “Husk”, un notable film que enturbiaba aún más la imagen de los asiduamente malrolleros espantapájaros.
Siempre son bienvenidos (por su habitual escasez) los personajes bien construídos con el suficiente carisma y algún que otro recoveco genuino, en el cine de terror y más todavía si el público potencial al que va dirigido el producto es mayoritariamente joven. Simmons resuelve con éxito dicho aspecto en “Monkey's Paw”, contando además con la virtud de otorgar al “objeto maldito” en cuestión, una notable sensación de grima y repugnancia. Digamos que la pata de mono posee una entidad propia, cercana al nivel que tuvieron en su día el cubo de “Hellraiser” o el Necronomicón de “Evil Dead” .
También se ha hecho un buen trabajo en lo que se refiere a realización y montaje: un filme consciente de su vocación “doméstica” no tiene, ni mucho menos, que hacer gala de baja calidad ni aspecto amateur.
La balanza, no obstante, se tuerce sensiblemente con el peso de las interpretaciones: no todos los actores están al mismo nivel. Son precisamente los más veteranos de la función, Stephen Lang y Charles S. Dutton, quienes rescatan a “Monkey's Paw” de una absoluta debacle actoral. Con todo y con eso Dutton, en el papel del detective de turno, tiene una intervención casi anecdótica. Aunque el caso de Lang es muy diferente: su personaje Tony Cobb evoluciona de manera convincente, llegando a resultar siniestro e intimidatorio.
Tiene la virtud Simmons de resucitar a Cobb, no como un muerto “a lo Romero”, sino como un individuo desalmado,