SANGRE DE CAMPEÓN Sangre de campeón | Page 92

de fuerzas bondadosas que te defienden. No te sientas solo, ni trates de resolver solo todos tus problemas. ¡Pide ayuda! -¡lVI, no te entiendo! ¿A quién le pido ayuda? Se acercó a mí. Agaché la cabeza. No sentí el contacto de su piel, pero sí un calor y una ternura que sosegaron mi alma. -Voy a contarte algo que yo misma vi -dijo después separándose un poco -: Hace tiempo hubo un tornado. La rama de un gran árbol cayó sobre la bicicleta de un niño. El chico era fuerte y tenía mentalidad de triunfador. Su papá le dijo: “te reto a que uses toda tu inteligencia para quitar la rama que está sobre tu bicicleta.” El niño pensó de manera creativa e hizo varios intentos: Tomó la rama por un lado y trató de girarla, pero ésta no se movió ni un centímetro; acercó un tubo y quiso usarlo como palanca, pero también fue inútil; finalmente quiso incendiarla; la rama era fresca y el fuego no prendió. Después de varias horas de trabajo, el niño se dio por vencido. Le dijo a su padre: “no puedo mover la rama, en realidad he fracasado.” El papá insistió preguntando: “¿Ya usaste todos los recursos a tu alcance para moverla?” “Sí,” le dijo el chico. “¿Estás seguro?” El joven volvió a contestar que sí. “¡Pues te equivocas!,” respondió el papá. “No usaste el recurso más importante: ¡Te faltó pedirme ayuda! Nadie puede lograr todo solo en la vida. Los verdaderos campeones hacen su mejor esfuerzo siempre, pero saben pedir ayuda a tiempo y les agrada trabajar en equipo con otros... » El padre acompañó a su hijo y entre los dos quitaron la rama. Ahora entiende Felipe: Cuando seas víctima de una injusticia, en vez de ponerte a llorar, debes hablar con las personas que pueden ayudarte. ¡Nunca te dejes intimidar ni permanezcas tirado! Tú tienes un problema y debes poner un alto ya. No puedes permitir que sigan abusando de ti. Ármate de valor y habla claramente con el director de la escuela, con tu papá y con el nuevo profesor de atletismo. No tengas miedo de contarles lo que ha ocurrido. Quien dice la verdad, recibe una protección especial. 92