SAMIZDAT | Crónica de una vida nueva Mayo2017 | Page 4

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MAYO 2017
¿Quién te ha dicho que el u
¿A qué te dedicas?
Me dedico a la física de neutri-
nos. Trabajo en un problema bá-
sico de entender cómo funciona
la naturaleza. Concretamente, la
pregunta a la que quiero respon-
der es: ¿Por qué en el universo
solo hay materia?
introduciendo una ligera asime-
tría. Es decir, según la teoría que
manejamos, el universo primario
presentaba un poquito más de
materia que de antimateria por
culpa del neutrino. Toda la anti-
materia original se aniquiló con la
materia original, quedando solo
ese pequeño exceso de materia
que se inyecta el universo y esa
es la materia de nuestro universo.
Vemos que en el universo no hay
o apenas hay antimateria. Y, sin
embargo, sabemos que en el uni- En resumen, me dedico a una
verso primario tuvo que haber la cosa bastante inútil: estoy inten-
misma cantidad de materia que tado encontrar la razón por la
de antimateria. Y, de hecho, de cual estamos aquí.
ello concluimos que el univer-
so nunca debió existir. Porque, ¿La ciencia enriquece tu vida?
de haberse producido la misma
cantidad de ambas –dado que En mi caso, la ciencia es la única
la materia y la antimateria se ani- manera que tengo de entender
quilan mutuamente y producen la vida. Para mí no se trata de
energía pura– el universo no se un trabajo que tengo de nue-
habría producido, sino que se ve a cinco. Yo no me entiendo a
habría aniquilado.
mí mismo si no soy
Sin embargo, hubo
científico. Para mí
“Me dedico a una
algo responsable
cosa bastante inútil: la ciencia es lo que
de que toda la an-
soy, es lo que me
estoy intentado
timateria desapare-
explica. ¡No solo!
encontrar
la
razón
ciera, quedara solo
Pero es en gran par-
por la cual estamos te lo que soy. Me
materia y aparecie-
aquí”
sen después la vida
permite entender el
y la inteligencia.
universo, maravillar-
Pues bien, nosotros creemos que me y acercarme más a él. Es un
ese algo está relacionado con lugar prodigioso y extrañísimo,
las propiedades de una partícula que pone los pelos de punta a
llamada neutrino. Es una partícu- cualquiera que abra los ojos. Mi-
la elemental que no tiene carga ras arriba, la inmensidad del cos-
y apenas tiene masa. Parece un mos, y dices: «En el universo hay
fantasma, un pedacito de nada. cien mil millones de galaxias, y
Sospechamos que en el univer- en cada una de ellas, que se ex-
so primitivo hubo neutrinos que tienden por catorce mil millones
presentaban propiedades de ma- de años luz, hay cien mil millones
teria y de antimateria. El neutrino de estrellas, y en una de estas
pudo desintegrarse un poco más estrellas hay un planetita donde
en materia que en antimateria, estoy yo, mirando todo esto y
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lo entiendo». Es prodigioso. La-
sensación de que el universo es
extraordinario, incluso milagroso,
en cierto sentido, y el hecho de
que la ciencia te permite enten-
der cómo funciona, comprender
los fenómenos que lo rigen e in-
cluso medir, no solo explicar, la
magnitud descomunal… Te sitúa
en tu justo lugar. Si me quitaran
mi profesión no sabría quién soy.
¿Has tenido referentes en tu vida?
Muchos. La primera persona, po-
siblemente la más importante de
mi vida, fue mi padre. Él estuvo
muchos años en Norte Améri-
ca, y fue a ver un gran árbol, una
secuoya que llamaban el Gran
Monarca. Mi padre me habló mu-
cho de aquel árbol, y cuando fui
a visitar el bosque muchos años
después, descubrí que el árbol
se había caído. Entonces escribí
un poema frente al Gran Monar-
ca caído, comparándolo con mi
padre. «Buscabas el cielo, pero
tus raíces no eran muy profundas.
Las mías sí lo son».
Mi padre era muy exigente con-
migo, y verle siempre trabajando
y disfrutando me ha dado unas
raíces muy profundas. En este
sentido, el primer referente que
me ha marcado es mi padre. Él
era más ingeniero que cientí-
fico, y me enseñó las primeras
nociones de ciencia: electrici-
dad, matemáticas… Su obsesión
por las matemáticas era glorio-
sa. De él aprendí la curiosidad
y el espíritu de trabajo. Cuan-
do empecé mi tesis doctoral
me encontré personas que me