Desde épocas remotas el agua ha sido un elemento esencial para el desarrollo de la vida. Actualmente nuestra existencia dependen por completo de ella, toda actividad requiere este preciado líquido; ciudades, industrias, cultivos, entre otros.
Es inconcebible saber que la cuarta parte de la población mundial no tiene acceso al agua potable. Más de la mitad de la humanidad carece de un saneamiento adecuado del recurso. La mala calidad del agua, la falta de higiene y la contaminación figuran entre las principales causas de epidemias, enfermedades intestinales y muerte.
En las comunidades rurales o urbanas, más de la mitad de los padecimientos tienen como causa principal los microorganismos transmitidos a través de la ingestión de agua o de alimentos contaminados.
Los lugares que carecen de instalaciones de saneamiento apropiadas favorecen la rápida propagación de estas enfermedades debido a que las heces expuestas a cielo abierto contienen organismos infecciosos que contaminan el agua.
El cólera, la fiebre tifoidea, la hepatitis A y B son algunas de las enfermedades que se transmiten por el consumo de agua no tratada. Practicar hábitos de higiene como lavarse las manos después de ir al baño o antes de preparar la comida reducen las probabilidades de sufrir alguna enfermedad.
PERJUDICIAL PARA LA SALUD
Este alerta y acuda a revisión médica si padece los siguientes síntomas:
Cólera:
Síntomas: Diarrea profunda, vómitos, dolores abdominales, deshidratación , sed.
Hepatitis A:
Síntomas: Fiebre, malestar, languidez, anorexia, náuseas, vómitos.
Fiebre tifoidea:
Síntomas: Fiebre constante, malestar, cefaleas, vómitos, anorexia, diarrea.
AGUA CONTAMINADA: