el momento en que entra el estribillo y coro principal en el que también podemos escuchar una hermosa orquestación con instrumentos de cuerda. En el medio tiempo estamos ante otro acercamiento con la música de medio oriente con un solo con guitarra acústica y luego los riffs excelentes en uno de los mejores momentos para los guitarristas y del mismo disco.
Con una entrada totalmente diferente hace su aparición Stigmata, un tema que continua con esa carga emocional que ha distinguido a este disco. Coros y sonidos que evocan nuevamente a esa región del mundo. A pesar de que su ritmo es más lento es totalmente sobrecogedora haciéndose este sentimiento más fuerte al final gracias a los efectos sonoros y al coro.
Cursed Canaan va entrando de forma paulatina, desde un principio que se asemeja a su predecedora hasta convertirse en una especie de himno épico con la marca característica de este trabajo discográfico; melodía, pasión y fuerza. Inmediatamente después hace su aparición