RIESGOS EN ECUADOR Chakana-Revista-de-Análisis-de-la-Secretaría-Nacio | Page 5

distribuyendo responsabilidades. En tal sentido, la Constitución de la República estableció que el Estado tiene la obligación de mi- nimizar la vulnerabilidad de las personas, las colectividades y la naturaleza frente a los efectos ne- gativos de los desastres de origen natural o antrópico. Para lograr este objetivo, se dispuso también la conformación de un ‘Siste- ma Nacional Descentralizado de Gestión de Riesgos’ (Sndgr) cuya rectoría recae actualmente en la ‘Secretaría de Gestión de Riesgos’ (SGR). Este sistema opera en los ám- bitos local, regional y nacional. Está integrado por ‘unidades de gestión de riesgo’ de las institu- ciones públicas y privadas, por entidades científicas que estudian amenazas y vulnerabilidades; y por mecanismos de coordinación. Entre sus principales compe- tencias se encuentran: identificar los riesgos de origen natural o antrópico; generar información suficiente y oportuna, asegurar la incorporación de la gestión de riesgos en la planificación, forta- lecer las capacidades ciudadanas para identificar riesgos, articular instituciones para la coordinación de acciones de prevención y mi- tigación de riesgos, garantizar el financiamiento suficiente y opor- tuno del sistema y coordinar la cooperación internacional dirigida a la gestión de riesgos. A su vez, la Constitución de la República definió que la gestión de riesgos procederá siguiendo el principio de ‘descentralización subsidiaria’. Según este, las ins- tituciones tienen responsabilidad directa en sus ámbitos geográ- ficos específicos. Sin embargo, cuando los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) no tienen las capacidades suficientes para gestionar los riesgos en sus terri- torios, las instancias con mayor ámbito territorial y mejor capaci- dad técnico-financiera intervienen en la gestión de riesgos brindán- doles el apoyo necesario pero sin relevarlas de su responsabilidad. La gestión tiene un enfoque integral El ‘Plan Nacional del Buen Vivir 2013-2017’ (PNBV) plantea objetivos de desarrollo para todo el país cuya realización presu- pone incorporar a la gestión de riesgos como un componente im- prescindible de los procesos de planificación que se realizan con distintos horizontes temporales y escalas espaciales. A tal efecto, por ejemplo, para poder alcanzar el objetivo relacio- nado con el mejoramiento de la calidad de vida de la población, se plantea como política especí- fica “garantizar la preservación y protección del patrimonio cultural y natural y de la ciudadanía ante las amenazas y riesgos”. De esta política, a su vez, se desprenden lineamientos y estrategias para la prevención, gestión y mitigación de riesgos; para el ordenamiento terri- torial orientado a reducir la vulne- rabilidad de la población; y para la generación de capacidades en los distintos niveles de gobierno y sus instituciones. Para lograr el cumplimiento de los doce objetivos del PNBV, se estableció la ‘Estrategia Territorial Nacional’ (ETN). Además de orien- tar las decisiones de planificación territorial en las entidades del go- bierno central y en los GAD parro- quiales, cantonales y provinciales, este instrumento prioriza la reali- zación de acciones relacionadas con los asentamientos humanos, la sustentabilidad ambiental, la trans- formación productiva y el cierre de brechas. Las intervenciones efec- tuadas en estos ámbitos contribu- yen a consolidar un enfoque integral de la gestión de riesgos a través de la implementación de criterios de ordenamiento físico de los territo- rios y sus recursos naturales, así como, de la reubicación de asen- tamientos humanos localizados en zonas de riesgo no mitigable. También la ‘Estrategia Nacional para la Igualdad y Erradicación de la Pobreza’ (Eniep) contempla el forta- lecimiento de las capacidades para la gestión de riesgos en los GAD subnacionales, las comunidades rurales y los vecindarios urbanos. Esta opción tiene una importan- te razón de ser: dada la distribución asimétrica de recursos materia- les y simbólicos entre los distintos grupos sociales, la reducción de la vulnerabilidad frente a los desastres contribuye a la erradicación de las desigualdades y la pobreza. Positivo Negativo El país cuenta con información adecuada Durante los últimos ocho años, se ha intensificado la generación de información para la gestión de riesgos mediante el fortalecimien- to del Instituto Geográfico Militar (IGM), el Instituto Geofísico de la Politécnica Nacional (IGPN), el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI), el Institu- to Espacial Ecuatoriano (IEE), el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) y las subsecreta- rías de información de las entida- des del Estado. Para coordinar la difusión y uso de la información disponible, Senplades estableció el ‘Sistema Nacional de Información’ (SNI). Su objetivo es integrar sinérgicamen- te a las entidades del Gobierno Central y a los GAD para así dis- poner de datos e información re- levantes para los procesos de pla- nificación del país y sus territorios. >> Chakana 5