mentalidad de los directores, maestros y padres. Una buena posibilidad sería incluir la
actualización anual tratado en las escuelas, los resultados en las teorías del conocimiento y la
investigación en neurociencia que demuestran los efectos beneficiosos en los seres humanos, los
temas de la educación musical. Otra acción relevante sería la de proporcionar maestros y
profesores de la formación necesaria en la metodología de la educación musical para actualizar
sus estrategias y enriquecer la práctica educativa. Continuar con el análisis, la discusión y el
intercambio entre colegas, sobre el contenido del programa objeto de este estudio, así como a las
formas apropiadas, experiencias y nuevas ideas para abordar en el aula, lo que es otra nueva
acción que ha surgido de la RS debe fomentarse. Seguimiento de verificación y recopilación de
materiales que podrían ser utilizados como soportes didácticos de todo tipo: obras musicales en
audio, video, documentales, actuaciones, resultados, colecciones, incluyendo programas de
software para formar un buen caldo, siempre accesible.
Generaciones de estudiantes han cambiado, el currículo ha transformado, programas de
artes han sido actualizados, ahora necesitamos una nueva actitud del equipo de la escuela. Los
jóvenes son capaces, como para expresar sus opiniones y defender a unos contra otros.
Concluimos nuestra reflexión con la siguiente pregunta: ¿Estamos preparados para los nuevos
programas y las nuevas generaciones? ¿Aceptamos a los estudiantes a expresar libremente su
opinión o cuestionar nuestra propia manera de hacer las cosas?
REFERENCIAS
Arnheim, R. (1993). Consideraciones sobre la educación artística. Barcelona, España: Paidós.
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