Revista Tarapaca Insitu Nº8 TarapacaINSITU_08 | Page 10
DESCENTRALIZACIÓN: EN QUÉ
ESTAMOS Y CÓMO VAMOS
por JULIO RUIZ FERNÁNDEZ (*)
LA DESCENTRALIZACIÓN HA SIDO UN CAMPO DE DISPUTA ENTRE CENTRALISTAS Y DESCENTRALISTAS, MÁS ALLÁ
DE DERECHAS, CENTRO E IZQUIERDAS. PERO HOY NOS ENCONTRAMOS EN UN MOMENTO DECISIVO. LO QUE ESTÁ
EN JUEGO: CONTINUAR CON UN DESARROLLO TERRITORIAL DESIGUAL O FORJAR UN DESARROLLO TERRITORIAL
COMPARTIDO.
N
o da lo mismo el
lugar en que se nace
y vive. Nacer y vivir
en Las Condes no
es igual que en Huara. Ello
determina las oportunidades
de desarrollo de personas,
familias y comunidades. Chile
no brinda iguales oportunida-
des a sus habitantes. Tenemos
altos niveles de desigualdad:
de ingresos; de género; de
etnias; y también territorial.
Así como el Congreso del
Futuro se interrogaba sobre la
especie humana: qué somos
y qué especie queremos ser,
nos podríamos interrogar qué
tipo de comunidad nacional y
regional somos y qué comuni-
dad queremos ser.
La desigualdad territorial
no es sólo económica, sino
principalmente política. Existe
una desigual distribución del
poder entre el centro y las
regiones, que hipertrofia el
desarrollo nacional. “Apoplejía
en el centro, parálisis en las
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extremidades, como decían los
críticos del viejo centralismo
francés” . Necesitamos un
nuevo regionalismo, que no
es sólo descentralización, sino
una nueva concepción de Chile
y de su desarrollo: compartido
entre todas sus regiones,
incluida la metropolitana.
ESTADO DEL ARTE
La descentralización significa
redistribuir el poder entre el
nivel central y sus territorios
(regiones y comunas) e implica
al menos tres grandes temas:
el político, el administrativo y
el financiero. El político hace
referencia a que la institución
“gobierno de la región” cuente
con autoridades electas por
la ciudadanía regional, a la
que deben rendir cuentas, y
que no sean designados por
el Presidente de la República,
como acontece hoy. Ya se
logró la elección directa de los
CORES. El 2020 habrá elección
de Gobernadores.
La nueva ley, sin embargo,
establece también la figura
de Delegado Presidencial en
cada región, que ejercerá las
tareas de gobierno interior y
coordinación de los servicios
públicos desconcentrados.
Se debate la coordinación
política que conllevan estas
dos autoridades, una repre-
sentando a la región y otra
representando al nivel central.
Hay parlamentarios opositores
a las elecciones de Goberna-
dores el año 2020 y pugnan, al
menos por su aplazamiento,
como los diputados Trisoti,
Urrutia y Cruz-Coke, lo que fue
desestimado por el gobierno.
La descentralización
administrativa apunta a las
competencias legales con que
cuenta el gobierno regional,
es decir, las facultades y
atribuciones que tienen como
órganos y sujetos estatales.
La ley de fortalecimiento de
la regionalización de enero
de 2018 dispone de nuevas
competencias para los go-
biernos regionales y, además,
establece un procedimiento
para transferir competencias
adicionales, ya sea por oficio
del Presidente de la República,
ya sea por solicitud del propio
Gobierno Regional, a partir del
2022; adecua la organización
del servicio administrativo del
Gore, y regula todo aquello
relativo a la gobernanza de las