Revista Tamadaba - 21 Revista Tamadaba - 21 | Page 44

Autoría - María Rosa Galván Sánchez, CEIP Tuineje El sabor de las emociones ¿CÓMO TE SIENTES HOY? Esta es una de las primeras preguntas que hago a niños y niñas de mi aula cuando cada mañana empezamos el día en asamblea y después de saludarnos. Ellos y ellas alegremente contestan: azul, rosa (es uno de sus colores favoritos), verde, rojo, amarillo o negro, aunque alguno-a también se atreve a expresar que está multicolor, porque se siente confuso-a y no sabe expresar qué sentimientos le invade. Desde hace tiempo vengo trabajando en el aula de forma puntual y dentro de los diferentes proyectos que desarrollamos actividades relacionadas con las emociones, ya que considero que es fundamental trabajar la educación emocional desde pequeñitos-as. Ayudada de ese maravilloso cuento titulado “El monstruo de colores” de Anna Llenas” mi alumnado va descubriendo y poniendo nombre a sus emociones, aunque mejor dicho primero les ponen color. Me voy a centrar en este artículo en explicar una de las actividades que realizamos para trabajar las diferentes emociones y son “los talleres de cocina”. Sí, porque creo que a través de los sabores igual que con los colores nuestro Pag 42 - Tamadaba Nº21 - 2019 alumnado puede expresar sus emociones y a la vez descubrirlas. Paralelamente considero que realizar estos talleres es muy positivo ya que se abordan varias facetas de su aprendizaje. Niños y niñas no solo disfrutan con las manos en la masa, sino que además aprenden a: • Insistir en la importancia de una alimentación sana y equilibrada, haciendo hincapié en el consumo de frutas y verduras. • Reforzar los hábitos saludables (lavarse las manos y dientes, limpiar la comida, etc.) • Distinguir los alimentos. • Distinguir los sabores básicos: dulce, salado, ácido y amargo. • Fomentar el trabajo en equipo • Generar una comunicación fluida, potenciando su autonomía, participación activa y toma de decisiones. • Asociar la comida sana y equilibrada con las emociones • Desarrollar los conocimientos básicos para la realización de recetas y manejo de utensilios. • Desarrollar la autonomía personal a la hora de realizar recetas, dejando espacio para proponer ideas y llevarlas a cabo. • Desarrollar la creativida.