Revista Tamadaba - 21 Revista Tamadaba - 21 | Page 15

El segundo de ellos, sobre el que versa el presente artículo, perteneciente a la Acción Clave 1 (Movilidad de las personas por motivos de aprendizaje), se denominó “Vientos de Cambio” y permitió a cuatro de nuestros docentes adquirir formación especializada en cuatro países de la Unión Europea: Malta, Reino Unido, Finlandia y Alemania, sobre temas de interés para su desarrollo profesional. En mi caso, como Coordinadora de Proyectos Europeos del IES Playa de Arinaga, consideramos que era necesario adquirir formación sobre movilidad e interculturalidad. Para ello, viajé a principios de octubre de 2016, a Malta, un archipiélago en el Mediterráneo que ejemplifica a la perfección la concepción de “Melting pot”, pues en él se entremezclan influencias europeas y árabes, de países como Italia, Grecia, Reino Unido, Túnez, Turquía y Libia, entre otros. El curso, denominado “Fostering Intercultural Communication through Mobility”, de una semana de duración, tenía como objetivo principal proporcionar las herramientas necesarias para salvar los obstáculos que pueden sucederse en situaciones en las que varias culturas entran en conflicto, tal y como podía suceder en las actividades de movilidad que estaban planeadas en nuestro “Vientos de Cambio” e, incluso, en las que planeábamos llevar a cabo con nuestro alumnado dentro de proyecto “Winds of Change”. se suceden multitud de situaciones en las que la interculturalidad juega un papel esencial, puesto que, indudablemente, nuestro alumnado proviene de varias y distintas culturas y toman parte en procesos de interacción y comunicación caracterizados por la “horizontalidad”, es decir, por la igualdad entre culturas, de forma que ninguna de ellas quede por encima de otra. La interculturalidad presente en nuestras aulas nos enriquece, al tiempo que se torna fundamental a la hora de organizar actividades de movilidad con nuestro alumnado, cada vez más habituales en los centros educativos. Es por ello que la preparación previa del alumnado que va a participar en actividades de movilidad europea ocupa un lugar destacado en la guía del programa Erasmus + y los proyectos que se presentan en las distintas convocatorias así deben recogerlo. No podemos olvidar, por otro lado, que, en un mundo cada vez más globalizado, existen amplias posibilidades de que nuestro alumnado deba interactuar, en algún momento de sus vidas, con personas de otras culturas, ya sea por motivos profesionales o personales. Para ello, es necesario desarrollar en ellas y ellos la competencia intercultural, que les dote de herramientas con las que ser capaces de adaptarse a todo tipo de situaciones y que les permitan solventar situaciones que, a priori, puedan resultarles complicadas, como puede ser una entrevista de trabajo en un país que no es el suyo. Además de en los distintos proyectos europeos que se encuentran en marcha en los centros canarios, en nuestra práctica docente diaria, Pag 13 - Tamadaba Nº21 - 2019