Revista Tamadaba - 21 Revista Tamadaba - 21 | Page 12

Autoría - Clara Isabel Medina Hernández, CEIP “Pepe Dámaso” Toda una experiencia DEBEMOS CONOCER CUÁLES SON LAS CONDUCTAS Y ACTITUDES QUE FAVORECEN LA CREATIVIDAD Y CUÁLES NO Cuando leí el tema central entorno al cual iba a girar la temática de la revista para esta presente edición (revista nº XXI) me vino inmediatamente a la cabeza una experiencia educativa que hice hace algunos años cuando, conjuntamente con una compañera de Educación Infantil, decidimos llevar a cabo una actividad con el alumnado de 5 años, que se convirtió, para nosotras, en toda una experiencia. Soy profesora de Religión Católica, por lo que durante el mes de diciembre (época en la que tuvo lugar dicha actividad) suelo facilitar a mi alumnado material fotocopiable relacionado con el Adviento y la Festividad de la Natividad en general, con el fin de trabajar dichos contenidos. Normalmente, hay alumnas y alumnos que durante la hora de Religión salen de clase con el-la tutor-a, porque no han elegido el área de Religión como optativa educativa, pero como ocurrió en esta ocasión, hay varios meses al año en el que tanto el profesorado de Religión Católica como el profesorado tutor, compartimos aula porque vamos a trabajar contenidos comunes y esto suele pasar entre otros, en el mes de diciembre (la Navidad), a finales de enero (Día de La Paz y la No Violencia Escolar), etc. Aunque no era la finalidad principal de la actividad, la idea nos sirvió para comprobar hasta qué punto muchas veces, sin querer, bien en casa, bien en el aula, coartamos la creatividad y libertad de expresión de nuestro alumnado o hijos-as, a través del desarrollo y puesta en marcha de las actividades o tareas que les proponemos diariamente. A continuación les explico el porqué y para ello voy a describir en qué consistió dicha experiencia, la cual se desarrolló a lo largo de varias sesiones: Pag 10 - Tamadaba Nº21 - 2019 En una primera sesión nos limitamos únicamente a poner en la mesa de cada alumno-a (colocados desde principios de curso en grupos de 6) una fotocopia donde aparecía un árbol de Navidad vacío y a su lado una bandeja con ceras de colores, gomets, trozos de plastilina y demás material escolar, útil para el desarrollo de la actividad. Cuando el alumnado fue llegando al aula, cada uno de ellos se fue sentando en sus respectivos asientos y una vez curioseado el material que tenían enfrente, comencé a darles instrucciones de cómo debían realizar la actividad a entregar, al tiempo que decoraba frente a ellos-as mi propio árbol de Navidad: Una vez terminado, lo pegué en la pizarra para que continuaran viendo el resultado. Poco antes de terminar la clase y a medida que el alumnado iba terminando su trabajo, los íbamos colgando en el rincón que la tutora tenía destinado para colgar los trabajos del día y cuando estaban todos colgados, sorprendentemente vimos que eran todos absolutamente iguales al que yo había hecho. Y como era de esperar, por falta de tiempo y demás, yo no utilicé ni la mitad de los materiales que se les había facilitado en la bandeja para el desarrollo de la tarea, por lo que ellos-as tampoco los utilizaron. Así que visto esto, decidimos alargar la actividad y proponerles que decoraran otro árbol, pero esta vez junto a sus familias como tarea conjunta para casa. Para ello les dimos como plazo límite de entrega una semana y junto a la fotocopia del árbol de navidad, adjuntamos una nota aclaratoria en la que les decíamos que el árbol podía decorarse como y con lo que quisieran: legumbres, acuarelas, trozos de tela, plastilina,… no había límites, siempre y cuando al final fuese un árbol de Navidad como