(PYMES) son generadoras de empleo y progreso en la calidad de vida de la
población.
En este sentido, Chiavenato (2006): define “cambio significa pasar de
un estado a otro. Es la transición de una situación a otra. El cambio implica
transformación, perturbación, interrupción y ruptura, que dependen de su
intensidad (…) (pág. 150). Asimismo, el Sistema Nacional de Garantías
Recíprocas,
atiende
a
todos
los
sectores
productivos
del estado,
destacándose hasta ahora el mayor repunte en el sector comercio y servicios
respectivamente. Por lo tanto, las PYMES como agentes sociales tienen como
finalidad robustecer la formación y capacitación de los ciudadanos, es decir, el
desarrollo social afianzado en las finanzas para la unificación en la política y
sociedad como impulso para el progreso del cumplimiento normativo.
De tal manera, el riesgo humanista es complejo en lo individual y
colectivo en las instituciones comprometidas para la gestión en procesos de
cambio, donde las tecnologías de información y comunicación están inmersas
en la globalización, como necesidad para transfigurar el contexto humana,
como reto en abordar y motivaren todo lo que nos encierra. Al respecto, Rojas
(2018), expone:
Ahora bien, la responsabilidad social en la universidad en
tiempos de posmodernidad genera nociones, generalidades
que pueden ocasionar críticas o diatribas, si enfocamos la
universidad desde segmentos dirigidos a la consecución de
propósitos en mejora de los contextos sociales que incumben
a su organización educativa. Asimismo, a la universidad, se le
confiere el título de crear ideas, sustentadas en el cumplimiento
de roles actuales planteados como es de esperar (pág. 310).
Por lo que la complejidad desde el sistema nacional de garantías
constituye procesos de otorgamiento en avales, pero constituyen parte muy
importante en la discusión del progreso económico de los emprendedores a
90
Artículo Arbitrado
interno bruto (PIB) nos indica si estas pequeñas y medianas empresas