Revista Scientific Volumen 3 / Nº 8 - Mayo-Julio 2018 | Page 103

El éxito de una organización depende de su capacidad para saber utilizar los valores de la sociedad global como apoyo para las normas que desea implantar. Con esta conducta obtiene un alto grado de adhesión del personal a la filosofía que ella propone, expresada en su visión, misión y valores. En ese sentido, la cultura organizacional está constituida por un complejo conjunto de condiciones de trabajo que abarca valores, tradiciones, políticas, supuestos, comportamientos y creencias que en gran medida son compartidos por un grupo humano, se manifiesta fundamentalmente en el lenguaje y los comportamientos de lo que se hace y se piensa en una institución, empresa u organización y dando a sus miembros sentido de pertenencia e identidad (Rodríguez, 2009). Por su parte, López (2005): considera que los valores organizacionales son valores compartidos, consisten en ser el cimiento de la organización y generan beneficios para las personas y empresas que los aplican. Los valores organizacionales envuelven el conjunto de creencias que una organización tiene sobre su quehacer diario; son el fuerte soporte de la cultura organizacional, inspiran y dan marco a la misión, visión y objetivos de la institución; han de internalizarse de tal manera que se manifiesten y sean tangibles en la actividad diaria de cada uno de los miembros de una organización. En consecuencia, guían la actividad humana en todas sus manifestaciones y por eso se espera que todos los miembros de la organización unan sus valores personales con los organizacionales, conformando un clima armonioso y exitoso. Sin embargo, la sociedad en su conjunto viene atravesando, según Briceño (2016a): una crisis de valores que, de alguna manera, es ocasionada por la adquisición de algunos antivalores y afecta distintos ámbitos, entre ellos, la educación y sus instituciones. Con relación a esto, Spluga (2015): habla de la existencia en Venezuela de una crisis de valores en los espacios escolares, 102 Artículo Arbitrado 1. Introducción