Revista Scientific Volumen 3 / Nº 10 - Noviembre-Enero 2018-2019 | Page 300

por lo tanto padres y maestros representan el mejor ejemplo a seguir, he allí la gran responsabilidad que se nos ha entregado. 3. Conclusiones Definitivamente, la palabra del Ser conlleva en su esencia la idea de transformación social, pues mediante ella se construyen espacios para la convivencia y la paz, al convertir el silencio en diálogo, la intolerancia en tolerancia, el mal en bien, los conflictos en espacios para la paz. Diría Freire (2007): “actitud dialogal” (pág. 113); sin duda, la palabra posibilita, en los entornos educativos, un clima institucional armónico, donde las relaciones interpersonales estén sustentadas en los pilares del respeto, la cooperación, la empatía, la solidaridad, la tolerancia, la creatividad y el conocimiento profundo del Ser, pues solo así se comprenderá el papel que desempeña en determinadas condiciones específicas de aprendizaje social y saberes compartidos, objetivo indiscutible de todo proceso educativo ya sea desde la escuela o en el seno del hogar. Es evidente que el diálogo creará el ambiente propicio para la construcción de conocimientos e ideas valiosas; es además fuente de vivencias afectivas y un estímulo para que el niño se implique en su aprendizaje. Desde el ángulo motivacional, el diálogo desde el Ser constituye una vía para activar la disposición humana hacia la búsqueda y construcción del conocimiento compartido y de espacios para la paz. Desde la perspectiva ontológica de realización humana, mediante la formación en valores para una ciudadanía con acciones en pro de la paz en el contexto educativo, es importante concertar que el desarrollo del Ser lleva consigo formar una actitud proactiva, innovadora, de creación al hacer propuestas y tomar iniciativas para transformar el entorno educativo y social; también, para aprender a reflexionar y autoevaluarnos como educadores, con 299 Arbitrado sólo es posible de evidenciar a través del comportamiento desde lo personal,