a continuación se establecerán otras experiencias generales más elaboradas.
Esta ardua tarea ha de hacerse de manera intencional y por ende amerita de
una planificación familiar, se trata de promover una crianza intencional y
organizada, la finalidad es adoptar un estilo parental que se fundamente en el
amor pero también en la firmeza, donde las normas se promuevan en amor,
cuyo objetivo es incentivar valores y principios que permitan que la interacción
en la sociedad sea la adecuada, donde la comunicación y el respeto al otro
sean valores intrínsecos en la actuación cotidiana. Es allí donde se
complementan la axiología y la pedagogía, donde el trabajo mancomunado
cobra mayor fortaleza, debido al aporte que, desde la individualidad, cada una
hace para la educación del niño.
2. Desarrollo
2.1. La Filosofía: Anfitriona de los Valores Familiares en el Contexto de
Una Cultura Ciudadana para la Paz
Martínez (1999): “Considero a la filosofía como un conjunto de
reflexiones de orden complejo en pro del avance del pensamiento hacia la
contribución positiva de la esencia del Ser, en este sentido debe reencontrar
su inspiración inicial” (pág. 49); como la que asumieron los griegos al
preguntarse por el principio del todo; aquella que persistió en los grandes
intelectuales de la edad media y la que hoy se ha perdido al considerarse una
simple y sistemática metodología. El propósito final de la filosofía siempre ha
de ser la de contribuir a la toma de conciencia acerca de la condición humana,
de la condición del Ser y el aprendizaje para toda la vida. Quien filosofa debe
tener la convicción que va en camino hacia el conocimiento de la verdad. Con
esto no se quiere decir que la verdad es de fácil acceso; pero si existe la
posibilidad de buscarla, y cultivarla.
La filosofía es la anfitriona del acto de educar, es la morada de los
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Arbitrado
primeras costumbres que conforman una apreciación del mundo sobre la que