ignorancia.
2.2. La infancia desde la concepción de Rousseau
Para Rousseau, la infancia parte desde que se nace hasta los dos años
de edad. En esta fase la educación sigue las normas de la naturaleza.
Considera esa etapa como la primera educación y por lo tanto, compete a las
mujeres o madres jugar un papel importante en ese proceso. El hecho de que
puedan alimentar mediante el amamantamiento a los niños las hace
merecedoras de ser la guía principal en esa etapa. En cuanto a la definición
de la educación (Rousseau, 1959a), manifiesta: “La educación es efecto de la
naturaleza, de los hombres o de las cosas” (pág. 42). Interpretando la idea
expuesta, la naturaleza se entiende como el desarrollo de las facultades del
individuo y la educación de los hombres es un medio para hacer uso de este
desarrollo. En cuanto a la educación del niño desde la perspectiva del
ginebrino, Montero (2009), señala:
Para Rousseau educar al niño, según su naturaleza, implica
proveerlo de las herramientas más eficaces para que pueda
vivir y vivir bien, libre y feliz en un mundo que no está hecho ni
para el bienestar, ni para la felicidad ni para la libertad (pág.
20).
Cabe decir, que la educación del niño tiene que abarcar elementos de
la vida como: el trabajo, respeto, amor, tolerancia entre otros aspectos. Desde
temprana edad hay que manifestarle al niño que el mundo en el que se vive
es un entramado de intolerancia y de desunión. Pero a la vez inculcarle que
existen principios morales que hay que colocar en práctica para encontrar
objetivos comunes como es la de llevar una vida en sociedad difícil de
comprender en sus acciones. También considera que la educación del niño no
ha de estar en tantas manos y al respecto Rousseau (1959b), sostiene:
203
Arbitrado
mejoramiento de la sociedad el cual estaba sumergido en un mar de