Revista Scientific Volumen 2 / Nº 4 - Mayo-Julio 2017 | Page 305

En la actualidad educar quiere decir formar ciudadanos y ciudadanas, los cuales no están parceladas en compartimientos, ni en capacidades aisladas; la capacidad de una persona para relacionarse depende de las experiencias que vive, y la educación es un lugar preferente para establecer vínculos e interacciones que condicionan y dependen de las propias concepciones sobre uno mismo lo que da y sobre los demás. Entender esta transformación exige un modelo pedagógico en que la escuela se configura como un microsistema por la teoría-praxis, con una organización social y unas relaciones interactivas entre el vínculo hogar, escuela comunidad a los procesos pedagógicos y los incorpore como parte fundamental a la formación integral de él y los educandos. Ante esta realidad, en aspectos relacionados con la educación, se orienta el horizonte escogido en lo concerniente a la calidad educativa. La UNESCO en la declaración de la educación para todos, plantea que la educación es tarea de todos porque supone compromisos renovados, de sus actores en espacios de corresponsabilidad. Nuestro país a raíz de la promulgación de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), la participación se asume como la columna vertebral de todos los proyectos sociales, porque proporciona oportunidades al ser humano para que ejerza su derecho como protagonista de su destino, al tiempo que busca la igualdad de oportunidades. El presente artículo tiene como propósito divulgar algunos avances relacionados con el trabajo de investigación denominado La Integración de los Saberes Comunitarios como Estrategia de Aprendizaje en la Praxis Educativa de la Comunidad de los Llanitos de Timotes; para que la escuela desde la dimensión socioeducativa emprenda la integración activa con la idea de reivindicar el sujeto como constructor de su propia comunidad y de la calidad educativa, y a su vez la forma más rica de los valores culturales y la 304 Artículo Arbitrado 1. Introducción