Revista Municipio 2019 Gibraleón Revista 2019 | Page 33

Y así era aquellos inviernos entre los años 40 y 50 eran largas las lluvias y días enteros sin ver el sol, escasos eran los jornales y escaso era el dinero que es lo que más vale, las aceitunas por coger ya que las máquinas no existían solo eran barejones y canastos que es lo que había, paro no había la ayuda familiar tampoco existía y yo recuerdo la escasez de comida como también los sueldos, esos si que eran malos, aquellos inviernos que yo recuerdo, gracias a aquellas tiendas que daba fiado y a la hora de pagar siempre paga más que lo que había sacado, fue aquel tiempo ya pasado. Otro tema que tocar fue la Isla varias minas de la cuenca minera aprovechando el volumen de agua que el Río lleva abrían sus compuertas y hay la lleva, el que la coja para él y fue la Isla la que la cogió y a ella le tocó el perder, ahí está ella que se puede ver quien la conoció y mira ahora como se ve, completamente envenenada con todos sus frutos que ella daba y había existido y todas sus frutas que hemos comido esto pasó a la historia como había sido, allí está ella envenenada y aquí todos callan y no hay nadie que reclame nada, como sería si en vez de ser Panturrana, hubiese sido Sevillana otros gallos cantarían de tarde, noche y de mañana. Fue la madre de la fruta como era y hoy como es, ese ácido de las minas la echó a perder, triste fue su agonía, se perdieron todas sus frutas y como no sus sandias. Un año más la vida sigue su curso, el Santo a las calles sale hace su recorrido por algunas de sus calles con su banda de música y todos sus avatares, acompañados de muchas personas de todas las edades, un año más ya que el pasado, pasado está, hoy estamos en este y otros vendrán. La vida sigue igual ella no tiene un terminar, el que vive vive y el muere ya no vuelva más. Lo importante es que estamos vivos no nos podemos quejar nos vemos y nos saludamos somos todos del pueblo, un pueblo de Panturranos de izquierda, de derechas, del centro y los de al lado, hoy todos nos sentimos hermanados con esta gran cena muy bien coordinada ya que en ella no se paga nada. Gracias a nuestro excelentísimo Ayuntamiento nos ha obsequiado a todos los pensionistas y jubilados, que rebose la alegría, vamos a pasarlo bien ya que son dos días. Y una vez que este evento haya terminado, a todos los asistentes que hemos compartido mesa muy hermanados, una vez finalizada nos damos las buenas noches y cada uno por su lado. 33