Masaje en el bebé
resistencia fisiológica eran mayores. Sin embargo, aquellos que
habían sido privados de caricias, se mostraban agresivos, irritables y con grandes dosis de ansiedad. Cuando la madre y la cría
han sido separadas durante el primer periodo que se considera
crítico, aunque se vuelvan a juntar más tarde es probable que la
madre rechace a la cría o que la descuide, creándose así la ruptura de los lazos afectivos que perdurarán para toda la vida.
Kennell Klaus, estudioso de la vinculación temprana, señala la
correlación que existe entre la falta de vinculación temprana y el
posterior descuido de ese hijo. Lo que reafirma la teoría de
Harry Harlow sobre los tiempos críticos de vinculación, no
basta con que haya una vinculación sino que ésta debe darse
inmediatamente. La madre debe entretejer con su recién nacido
una “placenta externa” que para el pequeño será como una prolongación de su vida intrauterina, y para ello deberá descodificar el llanto de su bebé.
La importancia del contacto se ha demostrado hasta en
los animales. Harlow, estudiando el comportamiento de las
crías de mono macaco encontró que las crías preferían a una
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madre felpuda que pudiera proporcionarles calor, frente a una
madre formada por estructuras metálicas aunque ésta suministrara leche. El sentido del tacto juega un papel muy importante en la primera vinculación afectiva que se establece con el bebé
y éste le proporcionará la “seguridad de base” para su futuro
desarrollo tanto psíquico como físico.
El cuerpo humano está regido por procesos eléctricos
producidos por rozamientos de tejidos y fluidos. Una acumulación de carga de alto potencial produce una enorme tensión
interior, lo que supone displacer y angustia. El recién nacido,
aislado en su cuna metálica y con ropa acrílica, necesita del adulto para que, juntando ambos cuerpos, pueda descargar energía,
con el consiguiente alivio de tensión.
El masaje estimula los sistemas muscular, circulatorio
y óseo; favoreciendo así el proceso de mielinización del cerebro y la maduración del sistema nervioso. Esta vaina de mielina tiene como fin proteger el nervio y acelerar la transmisión de los impulsos al resto del cuerpo. Sabemos que el
sistema nervioso del recién nacido es inmaduro, la estimula-