Revista Los Nogales no. 5 - Septiembre 2015 | Page 61
Caminatas / Colegio Los Nogales
este punto bajamos durante dos largas
horas, todos rendidos y con hambre.
Cuando llegamos a la antigua ciudad logramos esa meta que parecía imposible
solo horas antes. Llegar a Machu Picchu
solo lo logramos gracias al esfuerzo que
toma recorrer el Camino Inca.
Ese es el momento en el que uno se da
cuenta de que una caminata de cuatro días vale la pena, a pesar de que no
siempre sea solo una larga caminata con
subidas eternas; también nos toca desconectarnos del mundo ya que no tenemos
aparatos electrónicos. Por eso, al anochecer, generalmente comemos y jugamos
cartas con los que estén alrededor. Es en
estos momentos en los que interactuamos con estudiantes con los que normalmente no compartimos mucho tiempo o
con los profesores que nos acompañan.
Esto nos ayuda a conocerlos de otra manera, como amigos, no solo como compañeros o profesores en el salón de clases.
Recuerdo que en la caminata de 9º a la
Sierra Nevada del Cocuy jugamos durante horas cartas con Ian (aunque a los
estudiantes no nos fue muy bien, ya que
perdimos por lo menos cuatro partidas
de veintiuna). Fue la primera vez que estuve con Ian fuera de su oficina y en una
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actividad diferente a un regaño o a una
reunión con mis papás. Es en esos momentos en los que puedo conocer a mis
profesores como son verdaderamente, ya
que la persona que está trabajando y tiene que mantener una relación profesional con los estudiantes es muy diferente
a la que juega cartas con sus estudiantes.
Aparte de unirnos y mostrarnos que no
hay meta que no se pueda superar con esfuerzo, las caminatas nos dan algo que el
Colegio quiere dejar en sus estudiantes:
grit, que es la capacidad de seguir empujando cuando uno cree no poder más. Y
esto se ve en cada una de las caminatas
cuando uno cree que ya se va a dar por
vencido En Ciudad Perdida, las ampollas en los pies eran comunes y, aunque
dolían mucho, no nos detuvieron; ni
ellas, ni las subidas y bajadas incesantes,
ni los 1.260 escalones del camino. Todos
logramos llegar. Creo que por todo esto,
las caminatas son lo que nos hace verdaderos nogalistas ◉
El camino hacia la cima
es, como el viaje hacia uno
mismo, una ruta en solitario.
Alessandro Gogna
Montañista italiano