tencia y la movilización. Al tiempo que recompone su alianza política
oligárquica con todos los partidos de la derecha en el Congreso de la
República para imponer las reforma tributaria, laboral y pensional,
así como continuar con la privatización de las empresas estatales y
la entrega de los bienes comunes.
Adicionalmente, intenta confundir, cooptar, neutralizar, aislar y di-
vidir a los movimientos sociales con su demagógica propuesta de
Conversación Nacional, desconociendo el llamado de la mayoría de
la ciudadanía expresada en las calles, las encuestas y la opinión de
algunos sectores políticos, de la iglesia, el Procurador, la ONU y otros
actores, para que sea instalada una Mesa de Negociación con el Co-
mité Nacional de Paro. Contrario a ese llamado, el gobierno nacional,
a través de sus agentes, dilata su instalación con la esperanza de des-
gastar el paro y confundir a la opinión pública.
De nada le sirvió a Duque y su partido de gobierno, el Centro Demo-
crático, la infame campaña de miedo, terror, intimidación y mentiras
con que quiso atajar el descontento de millones, que corresponde al
desarrollo del fascismo atendiendo la política de los Estados Unidos
para América Latina.
Ampliamos y fortalecimos, el Comité Nacional de Paro como el es-
pacio de interlocución ante el gobierno de Duque, que interpreta las
reclamaciones del pueblo colombiano expresadas en la agenda que
recoge las líneas temáticas de los principales problemas que el go-
bierno debe resolver favorablemente a Colombia y a sus gentes, (la-
borales, tributarias, ambientales, agrarias, étnicas, de defensa de la
vida, los ecosistemas estrategicos y los territorios, acuerdos de paz
de la Habana, la agenda firmada por el gobierno nacional y el ELN,
acuerdos incumplidos, privatizaciones, corrupción, salud, mujeres,
garantías y Derechos Humanos, así como el respeto a la protesta so-
cial), todo mediante una negociación directa con el Comité Nacional
de Paro. Hasta hoy, el gobierno no ha asumido una actitud conse-
cuente con las dimensiones de las protestas ni con el contenido del
pliego, por el contrario, busca dilatar y diseminar nuestras exigen-
cias pretendiendo que sean parte de la llamada conversación nacio-
nal que solo busca nuevas formas de engaño, división y desatención,
que no estamos dispuestos a permitir.
DECLARACIONES
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