Revista Greca Revista Greca Número 2. | Page 43

los vuelven locos, les hacen perder esa ilusión de volver a la realidad, de eso se trata. Estos dos personajes es lo que transmiten, un « loco » al que ignoran y alejan, que solo quiere ser feliz siendo un caballero y un « rey de España » que quiere aprobación y encuentra encierro y difamación.
Lamentablemente hoy día, los hospitales psiquiátricos, los manicomios, los « locos » existen casi de la misma forma, entiendo completamente que ciertas enfermedades mentales estén comprobadas científicamente. No obstante, he visto casos, en que se le juzga a una persona como loca, por sentirse sola, por estar triste, ésta gente no sólo necesita un apoyo, necesita un entorno en el que sea bien tratada, no necesita estar en un lugar donde se le mencione cada segundo su « anormalidad » donde se sienta ajena al resto del mundo, todas esas personas merecen estar igual que nosotros en sociedad, más locos nosotros, que ya no tenemos ni siquiera valores, que vamos indiferentes ante la vida, que robamos, que mentimos, que somos sumamente individualistas, egoístas. «¡ Mira cómo le martirizan! ¡ Ampara en tu pecho a tu pobre huérfano! En el mundo no hay sitio para él. ¡ Lo persiguen! ¡ Madrecita, ten piedad de tu niño enfermo!... ¡ Ah! ¿ Sabe usted que bey de Argel tiene un bulto debajo de la nariz?»( Gógol, 2000, p. 23).
Qué viva la locura, lo diferente, lo raro; hace la vida más sustancial. Que sigan habiendo personas como don Quijote, como Aksenti, que no les importe soñar, que no se adapten a los parámetros que nos impone la sociedad.
Finalmente, solo queda aclamar a estos escritores, entre muchos otros, por escribir libros con una carga social tan importante, porque estas narrativas no son pesadas ni aburridas, al contrario, son cuentos, son historias que detrás tienen un mensaje bien planeado. Miguel Soler y su artículo me ayudaron mucho, analizar el perfil de don Quijote
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