Revista Foro Ecuménico Social Número 8. 2011 | Page 95

Responsabilidad Social y Ciudadana No podemos ser mercenarios de la RSE, estar dentro sin creer en ella, como si no interesasen los problemas de esta nueva forma de gestionar la empresa. Debemos crear empresas y organizaciones ciudadanas, esas empresas, esas organizaciones, esas personas que además de tener claro lo que tienen que hacer y el cumplimiento de su deber, son capaces de comprometerse socialmente, y tener una relación de equidad con el conjunto de los grupos de interés que le rodean, con las partes interesadas, porque siempre hay un horizonte ético de responsabilidad sin el cual la vida en común es imposible. Si recordamos “Rebelión en la granja”, “1984”, el famoso autor inglés que las produjo, George Orwell, cuando en 1952 dicta una conferencia hablando de Dickens, lanza el concepto del “common decency”, de la decencia en común. Es decir, de la infraestructura moral básica que hace que las empresas, las organizaciones y las personas puedan ser más justas y más equitativas. A la búsqueda de esa decencia común, a la búsqueda de ese sustrato moral básico que nos haga seguramente diferentes, pensando en el futuro, es hacia lo que tenemos que dirigir nuestros pasos las personas que creemos en esto de la responsabilidad social. Les dejo, para acabar, un hermosísimo verso de Walt Whitman, que cuando hablaba de personas y de futuro fue capaz de escribir: “Surgirá un nuevo orden y sus hombres serán los sacerdotes del hombre, y cada hombre será su propio sacerdote”. • Conferencia en el IV Encuentro Hispanoamericano de Responsabilidad Social Empresaria, que se realizó en la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina, con el auspicio del Foro Ecuménico Social y de otras entidades. 114• FORO