Revista Foro Ecuménico Social Número 8. 2011 | Page 60
Inserción laboral de jóvenes
Una vez que pasan
un curso de menos
carga horaria,
el año siguiente
les ofrecemos algo
mejor en calidad,
para que esos vecinos
se vayan motivando.
78• FORO
mos a hacer era ofrecerles a los vecinos
cursos de otras organizaciones, pero
que se hacían lejos de los barrios donde trabajaban. Eran cursos con mucha
carga horaria y mucha duración, con
excelentes diplomas o salida laboral.
Lo que nos pasaba era que la mayoría
de los vecinos no podía acceder a estos cursos porque su informalidad laboral hacía que le salía una changa y
no podían. O si tenían que “cartonear”
más ese día y no llegaban, para poder
dar de comer a su familia, enton ces no
podían ir al curso. O el curso les quedaba muy lejos y no les alcanzaba el
tiempo o el dinero para pagar
el transporte.
Nos dimos cuenta que dándoles ese tipo de ofrecimiento, las familias –más allá de que
querían y ellas mismas eran las
que pedían esos cursos– no podían acceder a ellos.
Dentro del barrio a los vecinos les
resulta mucho más fácil caminar 5 o 6
cuadras, dejarle 2 o 3 horas los hijos o
sus hermanitos con un vecino, así no tener que sacrificar un curso por eso.
Si nos acercábamos al barrio con esas
oportunidades, los vecinos eran los primeros en engancharse, los primeros en
darse cuenta que era una herramienta y
que valía la pena tomar el curso. Pero nos
dimos cuenta también que estos cursos,
de menos duración y menos carga horaria, no tienían buena salida laboral, y
que era difícil que lo apruebe el Ministerio de Trabajo, y que nos dé una certificación. Lo que estamos haciendo es entonces, de a poco, una vez que pasan un
curso de menos carga horaria, el año siguiente les ofrecemos algo mejor en calidad, para que esos vecinos se vayan motivando, que sean ellos mismos los que
vayan alentando para seguir mejorando.
En esto el tema de los jóvenes es algo
principal. Lamentablemente la mayoría de los jóvenes con los que nosotros
trabajamos no terminaron la escuela secundaria, porque tienen que salir a trabajar para ayudar a mantener a su familia. Otros jóvenes, pese a que hoy por
suerte están terminado la escuela secundaria, empiezan a tomar cursos de oficio
porque saben que una vez que terminen
la escuela no les queda otra que salir a
trabajar en lo que sea para mantener o
ayudar a mantener a sus familias. Entonces no solo están estudiando en una escuela secundaria sino que también están
haciendo uno de estos cursos para que
el día de mañana puedan tener mejores
herramientas para salir a buscar trabajo.
Por otro lado con respecto al tema
de los micro créditos, nos dimos cuenta
que la mayoría de los vecinos no cumplen las formalidades de las entidades
bancarias. Pero si somos un poco más
flexibles, si podemos trabajar en equipo
en aumentar las redes sociales, los vecinos son los primeros en que se comprometen. Hoy con más de 350 microcréditos entregados, tenemos el 99% de
devolución. No es un problema de dinero sino de oportunidades. No sé si
está bien o mal decir, en la Facultad de
Ciencias Económicas, que nosotros no
entendemos la pobreza como algo económico, sino que lo entendemos netamente como algo de oportunidades.
Cuando a las familias se les brinda las
oportunidades, encuentran las oportunidades que andan buscando de por
vida, y las aprovechan. Nos ha pasado
mil veces en estos cursos de oficios, con
los micro créditos, con la construcción
de viviendas de emergencia, con planes de educación o cualquier cosa que
hagamos. Es que las familias no piden
regalos, piden oportunidades y cuando
tienen oportunidades, al igual que cualquiera de nosotros, las aprovechan. •