Revista Foro Ecuménico Social Número 6. 2009 | Page 64
Desarrollo y Diálogo
Hoy no se puede
hablar de una política
nacional si no se
tiene en cuenta al
40% de la población
que es pobre,
a los más marginados.
82• FORO
Universidad Católica Argentina), del
sector social y credos (AMIA, ACIERA,
CIRA, Conciencia, Foro del Sector Social
y Comisión Nacional de Justicia y Paz).
Todos nos dijeron que sí y nos empezamos a reunir. Hicimos un pequeño documento disparador, en el que
juntamos 10 problemas fundamentales
para la Argentina, en materia de educación, salud, justicia y seguridad ciudadana, política social, reforma política y del
Estado, medio ambiente, organización
económica, integración regional y mundial, trabajo/empleo decente, tierra, infraestructura y hábitat, libertad
y responsabilidad ciudadana.
Además tomamos un
tema transversal, la inclusión
social, y vimos cómo cualquiera de los problemas repercutía en los excluidos. Queríamos
llegar al bicentenario con la posiblidad de incluir a todos. Hoy no se puede
hablar de una política nacional si no se
tiene en cuenta al 40% de la población
que es pobre, a los más marginados.
Después vimos que no iba a ser posible trabajar sobre todos esos puntos
pero que por lo menos éramos capaces
de tomar un punto o dos y hacer algo en
conjunto. Así seleccionamos dos grandes temas para comenzar a trabajar:
En la primer etapa: empleo y trabajo decente, para incentivar la formalización del empleo informal. Nos preguntamos cómo reducir el trabajo en negro
en la Argentina, ¿cómo lograr condiciones para que aumente el trabajo formal?
El trabajo en negro está fundamentalmente en las pymes menores de 5 personas.
El otro tema, dentro de educación,
fue la prevención de la drogadicción.
Después en la segunda etapa tomamos otros dos grandes temas: Niñez en
riesgo (erradicación de la desnutrición
infantil y materna) y Tercera edad (inclusión de los adultos mayores).
Los destinatarios de nuestro trabajo
son: en primer lugar el gobierno y sobre todo el Poder Legislativo, porque todas las propuestas en democracia sino se
convierten en leyes y las leyes no funcionan, no tienen sentido. En segundo lugar es la sociedad civil, porque tiene que
reclamar el cumplimiento de las leyes.
Cuando empezamos a trabajar nos
encontramos con dos grandes inconvenientes. Por un lado el personalismo excesivo de nuestras instituciones, que no
permite el crecimiento institucional. Necesitamos instituciones, partidos políticos con mayor desempeño, que eviten
los personalismos y permitan la continuidad de las instituciones más allá de
las personas. Por otro lado el segundo
tema es la ideología y la política. La ideología exagera las ideas y dificulta el diálogo.
Superar las ideologías y
los personalismos
Debemos como dirigentes cambiar
esta situación, fortificar las instituciones,
crear espacios de diálogo verdadero dentro de nuestras instituciones, superando
las ideologías y los personalismos. En las
organizaciones verticalistas hay militancia, en las comunidades hay diálogo. Debemos lograr en nuestras instituciones
pasar de la militancia a la comunidad.
¿Qué se requiere para que exista un
verdadero diálogo? El desafío era sentarnos y dialogar verdaderamente.
1º) búsqueda en común de la verdad;
la verdad la construimos entre todos,
cada uno tiene un parte de la verdad; 2º)
un espíritu de apertura y acogida; más
que convencer a los otros tengo que
comprenderlos; 3º) el diálogo se construye con métodos pacíficos; hay múltiples formas de mediación y negociación