Informe Económico. Julio 2012
4
mientras que el de la provincia de Buenos Aires supera los $113.000 millones.
El desequilibrio en las cuentas provinciales genera una dependencia absoluta con la Nación, ya que éstas tienen dos opciones: reducir gasto o solicitarle a la Nación recursos discrecionales. La primera opción tiene como resultado una pérdida importante de capital político y en algunos casos crisis políticas como la que se está gestando en Buenos Aires. La segunda opción fue la elegida por los gobernadores que tenían problemas financieros en estos últimos años, pero tiene como consecuencia que sus decisiones políticas comienzan a estar condicionadas por la Casa Rosada. El problema está en que la Nación también está comenzando a tener graves problemas fiscales por lo que ha
comenzado a recortar las transferencias discrecionales a las provincias, que en 2011 fueron de $35.000 millones. Cabe aclarar que la Nación está recurriendo al impuesto inflacionario y a la ANSES para evitar tener que hacer recortes.
Las Provincias, en el corto plazo y algunas en el mediano, deberán comenzar a reducir el gasto público ya que de continuar con la trayectoria actual (sumada a un menor crecimiento) se llegaría a una situación insostenible. Por su lado, la Nación está aumentando su gasto, que alcanza el 24% del PBI, de la mano de financiamiento de organismos públicos de emisión monetaria. Pero debería reducirlo ya que la emisión monetaria genera inflación y fianciarse a través de ANSES desfinancia el sistema previsional.
Hernan Lorenzino, Ministro de Economía de la Nación, en conferencia de prensa sobre la transferencia de $1.000 millones a la Pcia. de Bs As.
que tiene la Provincia cuyo déficit para todo el año se estima entre $12.000 y $16.000 millones.
Esta situación se repite en otras provincias argentinas, aunque a menor nivel, dado que son más pequeñas en términos económicos. Por ejemplo, Córdoba tiene una presupuesto de $26.000 millones,