Revista FADA Informe Julio/12 | Page 10

Desde 2002 el contexto internacional generó un "viento de cola" a la economía argentina que con un tipo de cambio elevado y una alta capacidad ociosa, estaba lista para aprovechar el impulso de la economía mundial a los precios de las materias primas exportadas por Argentina y la robusta demanda de los países vecinos por bienes con mayor nivel de industrialización.

Este impulso se detuvo en 2008-2009 por los efectos a escala munidal de la explosión de la burbuja inmobiliaria en EEUU y partes de Europa. La crisis bancaria que provocó el estallido de la burbuja tuvo como resultado recesión, desempleo, déficit y aumento del endeudamiento público para EEUU y gran parte de Europa. Esto produjo una disminución de la demanda de estos países, que tuvo repercusiones en las economías de los países emergentes como China, Brasil y Argentina.

Sin embargo, a partir de 2010 la economía mundial comenzó a recuperarse de la mano de importantes programas de estímulo en los BRICS y EEUU y la disponibilidad de dólares baratos producto de las políticas de reducción de tasas y compra de títulos de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED). Todo esto generó aumentos de precios de los aaaaaaaaaaaa

commodities y aumentos del flujo de inversión extranjera.

Este impulso del contexto internacional comenzó a disminuir a fines de 2011 con la agudización de la crisis europea y la debilidad del crecimiento de EEUU.

España: la situación social, económica y financiera de este país es delicada. La tasa a la que coloca deuda se encuentra en el 6.4%, para Europa y para el nivel de deuda español, es una tasa alta, que tiene un diferencial con respecto a la de Alemania de más de 5 puntos. Además, se estima que el PBI español cayó un 4.1% en 2011, mientras que el desempleo se ubica en el 24.3% y se espera que alcance el 26% en 2013. Por su lado, la deuda pública se encuentra en el 90% del PBI luego de la ayuda de € 125.000 millones destinados al sector bancario.

Grecia: este país no crece desde 2007, tiene un desempleo del 22.6% y una deuda superior al 160% de su PBI, que si bien no representa más del 2% del PBI de la Unión Europea el riesgo está en el efecto dominó sobre economías más grandes como España e Italia. En junio ganó las elecciones el conservador Antonis Samaras lo que llevó calma a los mercados y dió la señal de que Grecia hará lo posbile para permanecer en la

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Panorama internacional

Por David Miazzo