SEXUALIDAD SOFISTICADA A LA LUZ DE
UNA CANCIÓN: ¿SOLO PARA MUJERES?
Desde un inicio la sexualidad ha sido un factor de la humanidad cuyo
acoplamiento se dió en su momento de forma natural, por lo tanto, la
promiscuidad sexual y el comportamiento instintivo (animal) data de la era
primitiva.
Por motivos de poder y de religiosidad, la conducta sexual fue reducida al
proceso de reproducción generando pautas y roles diferentes tanto para el
hombre como para la mujer, encasillando a estas últimas en estereotipos que
estigmatizaban y reprimían sus acciones si no encajaban en lo socialmente
establecido. A pesar de esto, de forma alterna y con el paso del tiempo salieron
a la luz las enfermedades de transmisión sexual, las desviaciones y aberraciones
sexuales, la pornografía, homosexualismo (no porque antes no existiera, sino
porque se escondía), hasta encontrarnos en la actualidad con la equidad de
género, la ruptura de paradigmas patriarcales ancestrales, la reivindicación
social y sexual de la mujer, la sexualidad como un derecho de todos y todas, la
libertad de expresión sexual, en fin…
De esta manera y de ninguna otra, la mujer nunca ha estado bien parada
frente al tema. Ni muy reprimida… ni muy liberada, y esto me recuerda la frase
de Ricardo Arjona en su canción “pingüinos en la cama”: ¿Qué harías sin mí si
ya no vuelves a verme? -Para ser sincero haría lo mismo, sólo que, si estoy sin ti,
lo haría sin esconderme…. ¡Y exactamente eso nos ha sucedido a las mujeres!
Hemos defendido causas muy femeninas cuyo resultado ha sido el mismo, sólo
que ahora público y publicitado.
Me pregunto, si la actual manifestación de los sentimientos femeninos sin
tapujos, que ocupan las actitudes que en tiempos antiguos les correspondía a
los hombres, ¿satisface nuestras necesidades físicas, psicológicas y espirituales?
De ser así, ¿por qué somos objeto de un sexo grotesco, consumista,
discriminatorio, valorizado y obviamente desvirtuado? ¿Por qué sigue en
aumento la destrucción de matrimonios, familias y corazones, si la sexualidad
femenina se ha desmitificado?
Tan desmitificada está y tan “sofisticada” se ha vuelto la sexualidad que nada
más por poner un tema: la música, encontramos a nuestras estudiantes y no sé
si (penosamente) hijos(as) desde la edad pre escolar en adelante tarareando y
por qué no, cantando “a grito herido” frases como: “porque tú eres sólo mía y él
lo tiene que entender, que sólo chinga conmigo y él lo tiene que saber…”
(Farruko), “Se acostó temprano, mañana hay que estudiar, pero llamo a la
amiga diciendo pa´janguear, tiene un culito ahí que le acabo de testear” (Bad
Bunny). No solo cantando, también bailando (twerking) al son de frases como
“mueve tu trasero, abajo, arriba, hazlo como si doliera, como si doliera, qué, ¿no
te gusta trabajar? (Robin Thickle).
Podríamos hacer todo un tratado, pasando por muchos géneros musicales
(medio masivo para niños y adolescentes) y muchos otros temas que venden,
promueven, incitan, educan, refuerzan y reflejan la opinión que según muchos
nos merecen.