REVISTA CANDÁS EN LA MEMORIA numero 19 revista numero 19 | Page 27
QUERIDA PRIMAVERA
Querida Primavera :
Aquí estoy, en la celda de mi casa, anhelando tus aromas….
Y me asomo un poquito a la ventana para sentir el viento que me haga
respirar hondo al traerme tus olores, a los que añoro tanto como a los rayo
del sol, los espacios abiertos y el horizonte del mar.
Llegaste sin avisar y, este año, no vimos cuajarse en los prados las alfombras
de margaritas, no sentimos esos primeros y tibios rayos luz, después del frío
invierno, tan cálidos y ansiados. No supimos, tampoco, del cambio de color
del mar, ni de su sosiego cuando se torna azul y placentero. Ni apreciamos los
brotes de las flores, ni cuajarse los árboles de hojas, ni el piar de los pájaros
alborotando entre ellos, ni el retorno de las golondrinas.
Tenemos el alma atribulada por una angustia que flota en el aire acallando
nuestra voz y caminamos sonámbulos, en un tiempo detenido y extraño que
no alcanzamos a comprender
Anhelamos salir de casa y estrenar el día, caminar cerca del mar y empapar
el alma de salitre, pisar la hierba, un café con los amigos, conversar, abrazar y
sentir todas esas pequeñas cosas cotidianas que conforman nuestra vida.
Este año, Primavera, no podré participar en las tradiciones de mi pueblo
aunque me suba por la garganta el “¡Salve Estrella de los Mares! “, ni aplaudir
con emoción desbordante el desprendimiento del velo de “ El Encuentro “, ni
festejar con los míos los vestidos y zapatos nuevos, lo mayores que se hacen
los pequeños y lo felices que nos sentimos compartiendo juntos.
Este año, Primavera, pasaste de largo como las nubes empujadas por el
viento, trayendo contigo presagios de dolor aunque sé, y es lo que realmente
importa, que habrá muchas más primaveras y que volveremos a abrazarnos
felices de aunar nuestro destino, sintiéndonos afortunados de renacer.
Este año, Primavera, te veré cruzar de lejos con nostalgia y con tristeza y, en
el silencio de la noche, cuando la luna pase, abriré mi ventana y escucharé el
sonido del mar acompasado y lejano que llenará de esperanza mi corazón.
Querida Primavera, necesito tu libertad… no tardes.
Maite S. V.
27