Revista Aisthetikê MAYO 2014 | Page 9

porque esta asignatura es básica para la cultura de una persona, aunque el Gobierno se plantee quitarla del sistema educativo porque la encuentra inservible.

Y se tiene que dar justamente en la etapa del bachillerato, hacerlo antes sería precipitado; y hacerlo después sería arriesgado y tardío. La etapa del bachillerato se da cuando el alumno, generalmente adolescente está sufriendo un proceso de independencia frente a los padres, a los profesores…, y la sociedad en general. En ese momento se produce dentro del alumno adolescente el nacimiento o desarrollo de la exigencia a sí mismo de criticar todo lo que le pasa a su alrededor y tratar de resolverlo por sí mismo, y la filosofía puede ayudar de manera transcendental a este hecho.

Los jóvenes a esas edades se hacen gran cantidad de preguntas de las que no esperan respuesta, de la misma manera que lo hacían de pequeños; y el estudio de la filosofía puede ayudarles a encontrar estas respuestas o al menos a aproximarse. Los adolescentes necesitan buscar explicaciones racionales a problemas cuyas respuestas habían tenido hasta ahora por autoridad, es decir, impuestas directamente por alguien, o también por fe o creencias de distintos hechos. Una vez que el alumno entienda y aprenda la filosofía, podrá entender también muchas de las cosas aprendidas anteriormente en otras materias que hasta ahora no había comprendido en su totalidad.

Por todo lo expuesto y argumentado en este comentario personal, para mí la filosofía es necesaria en bachillerato, es más, es muy importante, y aunque a los estudiantes no les resulte gustoso su estudio, les hará crecer en su vida.

RAÚL RODRIGUEZ GARCÍA.

7