Revista Adofaip BOLETIN 01 ADOFAIP 2017 | Page 13

ASOCIACION DE OFICIALES DE LAS FUERZAS ARMADAS Y POLICIA NACIONAL DEL PERU ejecutantes; saben perfectamente que si el soldado no recibe este entrenamiento rápidamente será eliminado por el enemigo, será incapaz de cumplir una misión de combate, será incapaz de exponer su vida en aras de la misión recibida, no tendrá el “Espíritu de Cuerpo” necesario para exponer su vida por los integrantes de su equipo en provecho de la misión recibida por todos; pareciera que Ud. no ha leído las informaciones sobre el comportamiento de las Instituciones Armadas frente a las consecuencias inmediatas de fenómeno del “Niño Costero”; el apoyo inmediato que realizaron fue gracias al entrenamiento militar que habían recibido. En la Guerra es igual porque estas pueden llegar de una “semana para la otra” y si el personal de estas Instituciones no está en la situación que dice su Credo: “SIEMPRE LISTOS”, no será capaz de darle a la Nación ni a su pueblo la SEGURIDAD NECESARIA PARA EVITAR QUE SEA SACRIFICADA, como pasó en la Guerra del Pacífico, en la que los propios políticos peruanos con esas ideas absurdas que promueven hasta ahora, buscan a través de la “prensa amarilla”, enlodar su imagen para seguir rompiendo ese binomio Pueblo-FF AA, que resistió cuatro años (1,879-1,883) una guerra planeada para durar algunos pocos meses y tuvo que valerse de miserables traidores para que firmen una paz que realmente fue un saqueo para el Perú y todos los peruanos. 4. Dice Ud. “existe una cultura privada – y casi endogámica- en las FF AA que genera una serie de prácticas sociales, normas de convivencia y actitudes ante la vida”. Lo que existe es una Cultura Militar que todos conocen y no es endogámica, ya quisiéramos ser como Israel donde todos sus ciudadanos cumplen con el Servicio Militar llegando a conocer profundamente a sus FF AA. Efectivamente, la vida militar se desenvuelve bajo normas de convivencia muy particulares, lo que genera en los soldados, positivas actitudes para su vida particular y frente la Patria. Igualmente, como en cualquier organización de seres humanos existe también, en las Instituciones Armadas, una cultura jerárquica que impone orden y disciplina; la diferencia está en que, en las Instituciones Armadas, esta cultura es por naturaleza, VERTICAL Y DE ACEPTACIÓN CONSCIENTE, que nunca permitió, como dice Ud., “tolerar o permitir violaciones a los DD HH y un trato discriminatorio hacia las víctimas”; en la guerra que se vivió hubieron “bajas de Combate” en ambos lados; la diferencia fue que los militares recogían a sus bajas y los enterraban en los cementerios, los terroristas recogían a sus bajas cuando podían y los enterraban en fosas que solo ellos conocían y 20 años después las “descubrían” para acusar a algún militar como “asesino” de “inocentes campesinos”. Todos los casos anormales que se presentaron en la Guerra contra el Terrorismo, tenían nombre propio, la mayoría de estos fueron ejecutados por Militares Síquicamente enfermos por el largo tiempo de permanencia en la Zona de Emergencia y otros que cometieron Delitos de Función, fueron sometidos a la Justicia Militar y sancionados de acuerdo a Ley. Los pocos fueron los que, poniendo al margen las Leyes y Normas internacionales de la Guerra, cometieron delitos penales que han sido juzgados por los Tribunales de Justicia ordinarios y castigados de acuerdo a ley. Y la cultura machista a la que Ud. se refiere, es posible exista; pero no de ese machismo ventajista, ostentoso, abusivo del criollo peruano; sino de ese reto de estar siempre preparado para enfrentar cualquier problema que se le presente o se le encargue, no para alardearlo como Ud. supone. Por otro lado, nadie está preparado para nada, si no aprende como hacerlo; y, prepararse para la guerra, significa estar lo más cerca de ella, creando una realidad-ficticia; es decir, estar en la guerra, vivirla lo más realmente posible, pero sin la posibilidad de ser muerto. El Oficial, en todos los aspectos del conocimiento militar se prepara para la guerra y muchas de las pruebas que debe pasar, lo hacen llegar AL LÍMITE DE SUS POSIBILIDADES FÍSICAS Y MORALES, y no es un maltrato a sus Derechos Humanos, es simplemente hacerlo experimentar su propia potencialidad física y moral y hacerle ver que, cualquier ser humano y él mismo, tiene esa inmensa posibilidad de FORTALEZA FÍSICA Y MORAL ESCONDIDA, que se hará presente, cuando lo peligroso de la situación que vive, lo exija. 5. Habla Ud, del “maltrato físico” que sufrió un soldado del Servicio Militar Voluntario el 2,016 en la Base Naval de Iquitos; y agrega, “estos hechos “extremos” inoculan un sentido de mayor distancia entre la Sociedad y los Militares, etc.”. No son los hechos que Ud. califica como “extremos”, los que inoculan ese sentido de mayor distancia entre la sociedad y los militares; creo que son los articulistas y periodistas los que inducen y/o crean esa distancia que Ud. señala, cuando califican de “extremo” un ejercicio militar de rutina. Vea Ud. señorita articulista, he visto el ejercicio de la explosión en varios países y nunca escuché en esos países que era un acto contra los DD HH. Le relato, se trata de un ejercicio donde en un hueco se coloca un explosivo (que al explotar producirá gran estruendo, una onda explosiva que, del hueco para arriba, será inicialmente vertical), alrededor de él varios soldados a los que se les ha explicado que una granada de obús cuando va a caer produce un silbido que les da dos o tres segundos para tirarse al suelo y evitar la fuerza de la onda explosiva y las esquirlas que los puede matar, se les dice contaré desde el 1 hasta 5 que será el silbido de la granada y todos corren y se tiran al suelo, lo más bajo que encuentren; después a la carrera me buscan para dar tres RA si no están asustados; ¿de acuerdo? ¡si! listos 1,2,3,4,5. Me imagino que Ud. calificaría este simple ejercicio como “un extremo contra los DD HH”; pero para el soldado, mientras no esté en el Campo de batalla, será un ejercicio que siempre debe estar en su cerebro. Esta es nuestra gran diferencia. 6. Las FF AA son una Institución Tutelar de la República, no olvide Ud, que nacimos como República por acción de las Armas; nos mantuvimos como República por acción de las Armas, entonces a pesar todo el maltrato que recibimos por orden del Nuevo Orden Mundial, mientras tengamos un fusil, seremos una Institución Tutelar parta la Nación. No pretendemos mantenernos en ninguna esfera privada, los POLÍTICOS nos han puesto una MORDAZA para que no hablemos con la sociedad, Ud. lo sabe perfectamente somos NO DELIBERANTES. Los militares en Actividad no pueden HABLAR EN PÚBLICO y los militares en la Situación de Retiro no tienen la capacidad económica ni el poder de la Prensa, para que la sociedad conozca sus verdades. Esto es lo que no nos permite una relación cercana y transparente con la Sociedad; felizmente, “hoy por hoy” hay muchos militares y policías matriculados en las Universidades, lo que les permite intercambiar opiniones sobre la Seguridad Nacional. 7. Las viviendas y colegios de los militares no son para marcar distancia ni jerarquías, son para darles seguridad a los militares y sus familias. Imagínese la cantidad militares y de familiares que hubieran muerto por acción de los terroristas si hubiéramos estado viviendo en las ciudades, sin la seguridad correspondiente a su condición de