REFORMA EDUCATIVA | Page 41

La contra-reforma educativa profundidad, en lugar de atender a diez metros cuadrados con énfasis en la construcción y ejercicio, a fondo, de las estrategias para aprender”. La prueba para la Evaluación Universal de los maestros -remata- es “como usar un verificentro para bicicletas: el complejo proceso de generar ambientes para el aprendizaje no se puede valorar a la trompa talega. Así se ha hecho. ¿También en este asunto basta decir que se evaluó, haiga sido como haiga sido, y es un legado para la nación?”. En la misma dirección apuntan las reflexiones de los investigadores Díaz Barriga y Concepción Barrón (Lo programas de evaluación). Según los autores, La Era de la Evaluación en nuestro país se caracteriza por cuatro rasgos principales: a) su estrecha vinculación con prácticas de financiamiento, b) una desarticulación entre los diversos programas, c) la ausencia de una dimensión conceptual, con el predominio técnico de las diversas propuestas de evaluación y d) una desvirtuación de su dimensión pedagógica. Se evalúa para emitir un juicio, en detrimento de la función formativa y la realimentación de la evaluación. En el libro La mala educación en tiempos de la derecha, la profesora de la Universidad Pedagógica Nacional Tatiana Coll, equipara lo que sucede en México con la evaluación con los estudios sobre desnutrición. Después de 20 años de investigación, un investigador del Instituto Nacional de Nutrición -cuenta Tatiana- explicaba que ya era posible saber “los diferentes efectos que producía la desnutrición sobre cada una de las células de los diferentes tejidos del cuerpo”. Sin embargo, decía el científico, “lo único que no logramos en tantos años es disminuir efectivamente la desnutrición en el país, una enfermedad cuya cura, ya se sabe, es muy sencilla: comer”. Todos y cada uno de estos señalamientos críticos sobre el mito de la evaluación en México, muestran, con claridad, la naturaleza y los alcances de la reforma educativa en marcha. Lejos de mejorar la educación lo que la evaluación hará será incrementar los mecanismos de control sobre el magisterio. No hay una sola señal que indique qu e los funcionarios que sustituyan a los que hasta hoy han estado al frente de las áreas responsables de la evaluación dentro de la SEP harán las cosas de otra manera. No hay nada en la nueva norma que anuncie que la dinámica de la evaluación sera diferente. Por el contrario, lo más probable es que los problemas que se derivan de ella se agraven. El descrédito de la evaluación estandarizada La afirmación de que la evaluación docente es la panacea a los rezagos nacionales en el ámbito de la enseñanza, uno de los supuestos fundamentales de la reforma educativa, ha sido cuestionado, desacreditado, o, al menos, matizado, por académicos y 40