Desquite cizañoso: Elección extraordinaria en la capital de Tabasco
Ahora está en boga que las reglas cambian, y en política no podía ser la excepción. En tal sentido, la adecuación de una norma puede beneficiar o perjudicar de quienes estén en competencia por aspiración alguna. Es el caso concreto del Acuerdo que emitió el Instituto Nacional Electoral, con fecha 31 de octubre de 2015, en postular candidatos en elecciones extraordinarias para coaliciones, aplicable en Tabasco a candidaturas comunes, donde para presidente municipal aquellos partidos que pretendan ir en conjunto deberán postular mujer, si acaso alguno de éstos lo hizo en el proceso electivo ordinario de 2015.
Indiscutible que el Acuerdo en comento modificó el ajedrez de los candidatos con que habrán de participar los partidos políticos contendientes, habida cuenta que aquellos con el interés por postular en común a un candidato, como seguro sucederá con el PRI y el Verde Ecologista, la observancia deberá ser impulsar a una mujer porque los del tucán en el ordinario impulsó a Rosalinda López Hernández en asociación con Acción Nacional.
Las reglas, que para nada son nueva, diluyó la pertinencia de Acción Nacional y el PRD por ir también ir en candidatura común, por la obvia razón de mantener éstos a su candidato hombre: Gerardo Gaudiano Rovirosa, ligado una vez más a Nueva Alianza y tal vez se sume el PT. En esa lógica igual tendrá que ir sólo Movimiento Ciudadano porque su candidata en el proceso de 2015 fue Nelly Vargas.
Para el caso concreto del PRI y Verde Ecologista la decisión está tomada en formalizar el ir en candidatura común con Liliana Ivette Madrigal Méndez, con ello hacen a un lado a Evaristo Hernández Cruz, quien con sobrada razón ya lanzó su amenaza de que ese desaire no se quedará en la acción pueril.
Dese luego habrá las consecuencias para los aliados naturales desde 2002, cuando recién asumió Roberto Madrazo como presidente del Comité Ejecutivo Nacional, y Manlio Fabio Beltrones Rivera, hoy en esa posición, entonces la operó para su concreción.
Conocido que Evaristo Hernández Cruz no se queda con la afrenta, hará todo lo posible porque ese segundo lugar y los 51 mil 817 votos que obtuvo como candidato del PRI disminuyan a su mínima expresión, aún con los 38 mil 593 que obtuvo el PVEM con Rosalinda López.
El ex candidato priista a la alcaldía celebró y desde ya hacía planes para volver a competir en la extraordinaria, casi de inmediato a la anulación primera, del 15 de agosto de 2015, que decretó el Tribunal Electoral de Tabasco para la elección en Centro, esa sonrisa que se diluyó con la sentencia válida de la Sala Xalapa del Tribunal electoral del Poder Judicial de la Federación y luego resurgió con la sentencia inatacable de nulidad por la Sala Superior.
Pero con los acuerdos a conveniencia pactados a nivel nacional, y luego bajados al ámbito local, se le vino en definitiva abajo, no sólo el Centro que lo hubiera administrado por segunda ocasión, también en ello va implícito la plataforma para ir como candidato al Gobierno de Tabasco. Posición que estará reservada para Federico Madrazo Rojas, de cuño priista ahora en las filas de la franquicia del PVEM, incluida en la negociación de aquel año 2002 con Jorge Emilio González.
Si bien Liliana Ivette Madrigal Méndez hizo campaña proselitista con haber caminado gran parte de la comuna de Centro, circunscrita al Distrito 04 del Instituto Nacional Electoral, para ganar y ser diputada federal, no es lo mismo contender por un cargo de la esfera municipal.
Hernández Cruz negociaría ya con Morena y López Obrador, para que fuese él sucediera en la candidatura a Octavio Romero Oropeza, convaleciente de una cirugía a corazón abierto.
Con ello atraería su voto duro que sin duda pondría al borde de la derrota al que aún es su partido de militancia.
Eduardo Hernández / Poder Político
20 Reflexiones / Enero, 2016