1. ALCANCE DEL ANÁLISIS
En el documento “Donald Trump’s contract with the American Voter” se recogen las acciones de
la nueva administración de EEUU durante los primeros 100 días de mandato. Algunas son de
alto impacto en las políticas económicas internas y globales. El proceso para su
implementación ya ha comenzado.
Cualquier cambio sustancial en las políticas económicas, y por tanto la realización de dicho
“contrato”, depende del apoyo del Congreso, al menos en cuanto a la aprobación de fondos
para su realización, y de las trabas que pudiera poner el poder judicial.
En el ámbito internacional, China se ha convertido en las últimas décadas, gracias a la
globalización, en la segunda potencia económica y comercial. La crisis económica y financiera
de 2008 ha producido un estancamiento económico y financiero en la UE, que todavía está en
vías de superación. La nueva administración de EEUU no solo cuestiona la idoneidad para su
economía del tratado comercial con sus vecinos, México y Canadá, sino que no ha ratificado el
acuerdo de comercio transpacífico, ha dejado en suspenso el acuerdo comercial con la UE y
exige a sus socios de la OTAN que aumenten su gasto en defensa.
La nueva administración liga la futura política energética a la inversión en el fomento de las
fuentes de energía fósiles, para la creación de empleos, y a la retirada de fondos para la lucha
contra el cambio climático. La desinversión en fuentes de energía limpias, da la oportunidad a
otras potencias de liderar esos nichos de mercado económica, tecnológica y comercialmente.
2. CONCLUSIONES
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La deriva de la nueva administración de EEUU hacia el proteccionismo económico tiene
riesgo para su propia economía, debido a que según las normas de la OMC, otras
potencias podrían tomar medidas comerciales y económicas recíprocas.
●
La políticas económicas y comerciales planteadas por la nueva administración de EEUU
se están encontrando con obstáculos planteados desde varios ámbitos: poder judicial,
grupos de presión e incluso desde el propio partido Republicano. Por ello, estas políticas
no se han desarrollado más allá de lo que es estrictamente competencia del presidente,
quedándose en muchos casos en meros actos de impacto mediático.
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