QUINTA EDICIÓN EL GUÁCHARO DIGITAL | Page 2

EDITO VÍA ELECTORAL ES INDISPENSABLE PARA RECOMPO Gran parte del problema venezolano es el constructo institucional para aplicar soluciones, sobre todo en los actuales momentos que vivimos, porque mientras no exista armonía para gerenciar los resultados prácticos sino pugnas, las medidas se dificultan. Un método diferente al precepto democrático sería la aplicación de la fuerza para unificar institucionalmente la República; sin embargo, hasta ahora la proposición carece del apoyo de las parcialidades de forma absoluta, por lo cual se torna imposible su ejecución para generar rutas de solución. Por una y otra razón, volvemos al planteamiento electoral para definir el juego. No es ilógico, es una lógica de destranque. Quienes se oponen a esta vía, por diversas razones, lamentablemente no proponen otra lógica o contra-propuesta, y dejan el estancamiento y los problemas sin resolver; definitivamente, esa no es una opción para la mayoría de los venezolanos. Sin instituciones es imposible responder a la crisis, y el solo hecho de plantear los problemas no los encamina para ser resueltos; más allá de la voluntad contenida en actores determinados, las trabas en el poder estatal hacen inviables las políticas para afrontar la crisis. Ejemplo de ello es la llegada de los buques con gasolina de Irán; su llegada a Venezuela fue casi un casus belli y solo era una transacción regular del comercio internacional. Ahora bien, es posible pedirle a Nicolás Maduro apartarse y, de este modo, desaparecer los problemas para la instalación de un nuevo gobierno, lo cual es una situación inexistente, porque ninguno de los bandos puede imponérsele al otro de forma tajante. A esta circunstancia la denominamos empate catastrófico desde el punto de vista pesimista; también se llamaría equilibrio de fuerzas, al considerar tal condición como la oportunidad para lograr una mayor pluralidad y entendimiento en la sociedad, porque a nadie le conviene el estancamiento, las tensiones y la crisis. ¿En este punto, qué nos queda? Lo único disponible es construir una institucionalidad para avanzar hacia otro estadio y prescindir del suma cero, lo cual, hasta ahora, nos tiene subsumidos en un deterioro gigantesco. Requerimos “resetear” la realidad política venezolana para iniciar un proceso de mediación y de planes e inyección de recursos. Esa es nuestra lógica y, obviamente, respetamos las demás posiciones, no obstante, exten @elgu