QUERIDO HIJO ESTAMOS EN HUELGA Querido_hijo__estamos_en_huelga_-_Jordi_Sierra_i_F | Page 109

cambio, les propondremos contrapartidas. —Contra… ¿qué? —preguntó el burro de Fernando. —Contrapartidas, cosas que cada cual también quiera mejorar, como llegar más tarde a casa, jugar más tiempo con la videoconsola o tomar dos helados en lugar de uno en verano. Hay que pactar. Por eso la negociación no puede ser colectiva en este caso. No somos una fábrica con un comité, como me cuenta mi padre que pasa donde él trabaja. Cada cual es su propia empresa, así que tendréis que negociar uno por uno. Un padre querrá que su hijo no diga tacos, y el otro que estudie, pero el que tiene un hijo que ya aprueba lo que querrá es que sea puntual o… yo qué sé, cosas así. ¿Lo pilláis? Lo pillaban, lo pillaban. Vaya si lo pillaban. Y la sola idea de «negociar» con los padres se les hacía una montaña. —Mis padres lo querrán TODO —suspiró Josema. —Pues anda que el mío…