QUE BONITO ES MANZANILLO 13
criminales de guerra nazis, “solo seguía órdenes”.
No intento hacer una relatoría del movimiento estudiantil ni de la matanza de Tlatelolco, para esto existe la bibliografía al final de este escrito y aún más en libros valientes y artículos periodísticos tardíos, ya que la prensa no dijo nada o casi nada de la masacre en su
momento, así como el resto de los miembros de los supuestos Tres Poderes de la Unión, con excepción de Octavio Paz (que renunció a su puesto de embajador en la India).
Solo intento borronear sobre esta fecha y lugar para que la memoria no me traicione.
Pero… ¿Cómo continuar escribiendo tranquilamente sobre Tlaltelolco o Tlatelolco castellanizado?, la memoria es tirana y los recuerdos me asaltan y no sé cómo seguir sin perderme en la indignación, en la sed de justicia y me esfuerzo en no caer en el odio extremo, ese que no deja pensar.
Tal vez extendiendo el manoseo de este escrito como un artículo descriptivo del lugar que, siendo tan emblemático y con tantos antecedentes distintivos diluya un poco el sentimiento de revanchismo y rencor que no hace bien a nadie y
entonces lo convierta en el sentimiento correcto, el de la búsqueda de la Justicia.
• Justicia para los caídos esa tarde noche del 2 de octubre de 1968 vísperas de las XIX olimpiadas
• Justicia para los ejecutados de ese atardecer, amontonados en el estacionamiento y luego transportados en camiones del ejército y en las ambulancias;
• Justicia para todos los capturados en la Plaza, en los departamentos de los edificios a los que entraron los soldados sin orden judicial,
• Justicia para los torturados y desaparecidos, confinados, aislados e incomunicados: en el Palacio negro de Lecumberri, en los cuarteles militares, en las casas de seguridad y en cualquier lugar fuera de la mirada de la sociedad;
• Justicia para sus padres y familiares que sufrieron tan horrenda, dolorosa e inimaginable pérdida;
• Justicia para todos nosotros que año con año la esperamos.
¡Justicia para México!
Al término de este escrito y parafraseando a muchos mexicanos digo:
“EL 02 DE OCTUBRE NO SE OLVIDA”
* Para obtener la cronología completa acudir a www.tlatelolco.unam.mx/museos1.htlml repetida abajo.
Se recomienda la lectura de libros como “La noche de Tlatelolco” de Elena Poniatowska Amor. Y “Tlatelolco T 68” de Juan Miguel de la Mora, que fueron escritos oportunamente.
Nota: No se incluyeron fotografías impactantes por lo sanguinario, para verlas pueden acudir a la dirección abajo anotada de Arnulfo.wordpress.com.
Bibliografía
• http://www.oocities.org/es/ciudaddelaesperanza/Tlatelolco.html
• http://arnulfo.wordpress.com/2011/10/02/tlatelolco/
• http://www.tlatelolco.unam.mx/museos1.html
• 100 Mitos de la historia de México, Francisco Martín Moreno, editorial Aguilar.
• Breve Relato de la Historia de México, Kathryn S. Blair, editorial Punto de Lectura.