los dichos de los viejitos...
“Igual que en tierra suelta, La humedad penetra. Así te metes tú, Poquito a poco”.-
Don Chon cantaba muy inspirado a la sombra de la Jacaranda repleta del morado de sus flores, los zanates parecían encantados escuchando su voz cascada pero muy entonada y se paseaban a su alrededor con pasos marciales- “Podríamos decir, Que apenas te conozco. Y ya te llevo en mi, Como algo de mi todo”-
Sentado en la sombra del frondoso árbol, daba la espalda al acceso del lugar y no se enteró que don Cipriano se aproximaba con su andar pausado. Ya había escuchado a su amigo cantando y procuraba no hacer ruido con su bastón en los adoquines que vestían el piso de la zona. Cuando por fin llegó con don Chon, podía tocarlo pero prefirió dejarlo terminar la canción, después de todo a él también le gustaba.
“Ya me haces falta tú, Como el azul al cielo. Estoy unido a ti, Como el calor al fuego, Me hiciste revivir, Me diste fe y consuelo. Trajiste para mi… Cariño nuevo”.
¡Bravo, bravo!- gritó don Cipriano aplaudiendo con entusiasmo
- don Chon pegó un brinco que casi deja caer su bastón- ¡No la chifle que es cantada, don Cipriano!, me acaba de pegar un sustote, otra y me tiene que pagar unos calzones nuevos o cuando menos la lavada.
¡No te arrugues ni te espantes, que es el mesmo de endenantes! No es para tanto don Chon- contesto don Cipriano aun con la sonrisa de oreja a oreja- después de todo no cualquier día se puede escuchar una canción tan bonita como “Cariño nuevo”, y además con tanto sentimiento.
Pues gracias en lo que cabe, recuerde que a mi edad, si brinco me mato y si salto me desbarato; me anima su comentario, pero ya puede esperar sentado a que cante otra en su presencia.
Ni que fuera para tanto don Chon, lo que es parejo no es chipotudo
¿Y…luego?, ¿porque llegó hasta ahorita don Cipriano? Al que madruga Dios lo ayuda- dijo don Chon cambiándole la plática a su amigo.
Pos sí… pero no por mucho madrugar amanece más temprano; pero la verdad es que mi hijo Juancho que le tocó traerme hoy, llegó tarde porque tiene problemas en el trabajo, ahora resulta que no lo habían asegurado en el IMSS, y anoche se le puso mala mi nieta Chabelita y cuando llegaron a Urgencias resulta que no estaba dado de alta, pero como mi nietecita estaba muy malita la atendieron pero tiene que arreglar ese asunto.
Si, sé a qué se refiere don Cipriano, eso también le pasó a mi hija, trabajó durante 10 años pero como estaba muy jovencita nunca acudió al Seguro Social
Interrumpiendo don Cipriano preguntó- ¿se refiere a la que da clases en un Jardín de niños?, ¿la que trabaja en un colegio de monjas?
Por Dagoberto Javier Tortolero