PUERTA de EMBARQUE - Octubre 2016 PUERTA de EMBARQUE - octubre | Page 14
4
Otoño en Extremadura
PUERTA DE EMBARQUE - Octubre 2016
Los colores del otoño
Un paisaje que ha cambiado sus ropajes para vestir espectaculares
dorados y rojizos esperan al visitante en Extremadura. Por Víctor Saornil
T
ras el estío, el otoño se abre paso en tierras extremeñas transformando sus paisajes. El verde del verano se convierte en
una sucesión de tonalidades doradas y
ocres que ofrecen una nueva visión sobre
los parajes naturales de la región. Paisajes que salpican
la geografía extremeña, donde los bosques caducos
se liberan de sus hojas en una sucesión de amarillos
insertados entre el perenne verde de la dehesa.
Sin duda, la mejor manera de apreciar esta transformación es recorrer el Parque Nacional de Monfragüe.
El río Tajo es la columna vertebral de este espacio que
se extiende por tierras cacereñas, también bañadas por
las aguas del Tiétar, donde se suceden dehesas, bosque
mediterráneo y roquedos, confor mando un paisaje
otoñal de múltiple colorido. El parque está incluido en
la Reserva de la Biosfera de igual nombre que alberga 116.160 hectáreas de territorio natural protegido
y habitado por más de 200 especies de vertebrados
entre las que predominan las aves. Entre ellas, destaca
la presencia del buitre negro, el águila real, la cigüeña
negra, el buitre leonado, el búho real y el águila imperial ibérica, junto al gato montés, la jineta o el zorro.
Encinas, alcornoques, quejigos enebros, alisos y jaras
visten este espacio que los romanos bautizaron como
“mons fragorum” (monte denso). Entre su patrimonio, destaca el castillo desde el cual obtener algunas
de las mejores vistas del parque. A su vera, se levanta
una pequeña ermita que alberga la talla de la Virgen de
Monfragüe, traída desde Palestina por los caballeros
de la Orden de Santiago.
Cerca de Mérida, se encuentra el Parque Natural de
Cornalvo, creado alrededor del embalse romano más
antiguo (construido en el año 130), mejor conservado y en funcionamiento de Europa que recoge las
aguas del arroyo Albarregas para abastecer la ciudad
de Emerita Augusta. A su alrededor, un territorio de
gran valor natural cuya especie más emblemática es la
cigüeña negra.
Miembros de esta especie amenazada también se
hallan en el Parque Natural Tajo Internacional. Inmejorable ejemplo de bosque mediterráneo, se encuentra al noroeste de Cáceres y protege el recorrido del
río Tajo y sus afluentes Erjas y Sever a lo largo de la
frontera con Portugal. Ambas orillas forman parte
de un espacio protegido de más de 25.000 hectáreas
de riberos donde perviven especies como el águila
imperial ibérica, la nutria, el lagarto verdinegro o el
cangrejo de río autóctono. El lirio amarillo y la serapia
verde, un tipo de orquídea en peligro de extinción,
son las especies más llamativas de la flora de un lugar
salpicado de restos megalíticos y vestigios romanos,
visigodos y judíos.
PEQUEÑOS RINCONES
Para el viajero más avezado, Extremadura guarda más
sorpresas. Reservas y monumentos naturales, paisajes
protegidos, corredores ecológicos y de biodiversidad y
zonas de especial protección para las aves conforman
un conjunto de espacios naturales de obligada visita. Entre todos, destaca la Reserva Natural Garganta
de los Infiernos, espacio natural protegido en el Valle
del Jerte, formado por una sucesión de saltos de agua,
arroyos y piscinas naturales. Agua que alimenta una
vegetación que alterna bosques caducifolios y de ribera,
piornales serranos y pastizales alpinos. La diferencia de
alturas posibilita la existencia de pequeños microclimas,
proporcionando refugio, entre otros, al gato montés, la
gineta, la nutria, la cabra montés y el extraño desmán,