INVESTIGACIÓN
ASESINATOS DE LÍDERES SOCIALES, TEMA DE COLOMBIA QUE PREOCUPA A LA ONU
Este jueves fue la tercera vez que Colombia se sometió al Examen Periódico Universal (EPU), una evaluación que revisa el cumplimiento de derechos y leyes fundamentales al que se someten los 193 países que hacen parte de Naciones Unidas. Uno de los voceros que tuvo el país durante la presentación fue el ministro del Interior, Guillermo Rivera, quien aseguró que “Colombia es un país muy diferente al de hace unos lustros”. El funcionario habló sobre la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno y las Farc, en 2016, y la búsqueda de un tratado con él. “La firma del acuerdo no es la paz en sí misma, sino la búsqueda de una sociedad más justa e incluyente", recalcó.
Dentro de las cifras que resaltó la comitiva nacional durante el EPU estuvo la reducción de los índices de violencia: 2017 fue el menos violento de los últimos 42 años. Además, se afirmó que los accidentes causados por minas se han reducido en un 95%. Sin embargo, dentro de los temas que más preocuparon a los países que intervinieron en la evaluación, está el alto nivel de acoso y homicidios activistas.
“Manifiesto nuestro absoluto rechazo a todo tipo de violencia en contra del ejercicio de la labor de los líderes, y reconocemos su trabajo como elemento fundamental en el fortalecimiento de la democracia y del Estado Social de Derecho”, dijo Rivera respecto a este tema.
El 2017 fue el menos violento de los últimos 42 años.
Otro de los temas preocupantes que se tocó fue el de los falsos positivos. Tanto Estados Unidos como Venezuela pidieron que no queden impunes. Adriana Mendoza, la viceministra de asuntos multilaterales dijo que “cuando se avanza decididamente en la implementación del Acuerdo de Paz y en el fortalecimiento de las acciones encaminadas al respeto, garantía y promoción de los Derechos Humanos resulta fundamental seguir contando con la cooperación internacional para afrontar los retos que persisten”.
.Colombia y los derechos humanos
El último informe de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en Colombia presenta algunos datos que invitan a la esperanza, pero también recoge otros que mueven a la preocupación.
En lo que respecta a los aspectos positivos, la organización internacional destaca que se han producido numerosos avances en materia de respeto a los derechos fundamentales. Y también felicita al Gobierno por “la determinación con que trata de encontrar una salida negociada al conflicto interno”. Esto último constituye un claro espaldarazo al presidente Santos frente a quienes, por distintos motivos, se oponen a las negociaciones de La Habana con la guerrilla.