PROYECTO OVNIS LA REVISTA 1 Proyecto Ovnis - La Revista - Nº 1 | Page 21

Revelaciones DEL FIN DE LA HISTORIA Por : Lupus Felis S egún la ortodoxia: sí. Literal- mente ambos significan ungi- do. Mesías de Messiah, es palabra de tradición hebrea: de masháj ungir, untar y de mashíaj ungido. Cristo del griego Christós es palabra de tradición pagana, es decir no he- brea. El vocablo llegó a nosotros por los griegos, y según las enciclopedias de la lengua española también significa “ungido”. Robert Graves, en su obra Rey Je- sús traduce Chrestos (latín) como “hombre bueno”. Robert Ambelain traduce Jesus-Cristo como Salvador Sagrado En la antigüedad se ungía (derramar aceite sobre la cabeza) a los reyes, y en toda la historia griega conocida, no se sabe de Rey alguno que lleva- se el título de Cristo, y sin embargo todos fueron ungidos. Así que debe- mos concluir en primer lugar, que el término significa algo más que ungi- do, y que la palabra, fue heredada por el mundo griego de otro, u otros pueblos más antiguos, como ser Iberos, Dorios, Etruscos, Pelasgos, Albiones, Frisones, Celtas, etc.; pue- blos de los que lamentablemente se sabe poco, pero que marcharon a través de la historia por casi la totali- dad del viejo mundo. Hubo muchos “hombres buenos”, pero que sepamos a ninguno, se le llamó Cristo. Cuando Jesús vivía, lo hizo entre ju- díos, así que lo más probable es que lo llamaran Rabí o Mesías, pero no Cristo. Jesús “Yehoshúah o Joshua” significa “Aquel que Yahvé es su salvación” o “Aquel que Yahvé es su salvador”. Inclusive es probable, que el voca- blo tenga raíces en el sanscrito, o en algún lenguaje olvidado de aquellos que descendieron del Cáucaso hacia la India, entre los monjes ksatriyas, por ejemplo, o en los veneradores de Krishna, del cual la historia del nacimiento en los evangelios parece calcada. Pero lo que no admite duda alguna, es el hecho de que el vocablo y la historia del Enviado y el Nacimiento Virginal ya existían antes de la llega- da de Jesús, entre los pueblos paga- nos. Y lo segundo que no admite duda, es que los evangelios fueron escritos en griego y para los pueblos gentiles. Si el personaje central de la historia de los evangelios hubiese tomado el nombre de Jesusmesias (que sería lo correcto), entonces la nueva reli- gión destinada a unificar el imperio romano ya no hubiese sido nueva, sino una secta más desprendida del Judaísmo, como los fariseos o sadu- ceos, y la cabeza de tal iglesia ten- dría que ser necemente hebrea... no romana. Pero; muerto el burro… puesta la tranca, porque después de la destrucción de Jerusalén en el año 67 por tropas romanas, y la expul- sión de los judíos de su territorio, los padres de la iglesia -no judíos -supu- sieron que el judaísmo iba a desapa- recer para siempre de la historia, y el vocablo Mesías fue reemplazado por el de Cristo de uso común entre los paganos a ser evangelizados. Así que “todo apunta a” que la his- toria relatada en los evangelios, “puesta en orden” a partir del siglo III por los obispos bajo el mandato de Constantino; pasó a ser un sin- P ágina 21