¿Alguna vez han intentado estudiar o leer mientras en la sala hacen ruido? Nos ha pasado, uno en su cuarto intentando concentrarse para no reprobar materias como matemáticas o física (en especial física), y en la sala con la música más fuerte que un concierto; esas cosas son las que pueden llegar a irritar a las personas, y hacer que las cosas no salgan nada bien. Pero bueno, ¿para qué tanta charla?, pues resulta que si hay maneras eficientes de no escuchar ruido.
El sonido no se extiende si no puede pasar por algún sitio, lo que quiero decir con esto es que el sonido mientras no choque o colisione contra un objeto va a seguir propagándose por el medio.
La manera más eficiente de no escuchar un ruido cuando quieres concentrarte o simplemente cuando no quieres escuchar nada, es tan fácil como cerrar la puerta, ya que al cerrar la puerta, estás haciendo que el sonido no pueda pasar ya que al momento en que las ondas de sonido intenten pasar van a estrellarse o por lo menos obstaculizan más el paso de las ondas para que al momento en que tu escuches el ruido no lo escuches con la misma intensidad.
El fenómeno que sucede cuando el sonido choca contra la puerta es la reflexión, ya que cuando el sonido golpea contra la puerta el sonido es dirigido a otra dirección, sin embargo también es cierto que la puerta absorbe algunas de las ondas. La reflexión es el reflejo de las ondas hacia cualquier otro lado.
El ruido con la puerta entre abierta y con la puerta cerrada