Además, lesionaron a otras 24 personas y tres más resultaron heridas al intentar escapar de la escuela. Los perpetradores se suicidaron posteriormente.
Aunque sus motivos exactos no están claros, los diarios personales de los perpetradores documentan que deseaban que sus acciones rivalizaron con los bombardeos de Oklahoma City y otros incidentes mortales en los Estados Unidos en la década de 1990. El ataque ha sido definido por USA Today como un "ataque suicida planeado como un gran bombardeo terrorista". La masacre ha sido reportada como "el tiroteo más mortífero en una escuela secundaria en toda la historia de Estados Unidos."
Actividad 4: