Portaligas #02 - Especial Copa de Oro COF - Copa Confederacio | Page 47

LIGA LA REINA < 47 En 1986 se concreta la compra de los terrenos de Huechuraba. Raúl Far- fán, Mario Bravo y Fernando Santos fueron claves dentro de este proceso de compra. “Bravo llegó con el dato de la venta y Santos fue mi mano derecha en las decisiones”, comenta el actual mandamás de la liga. Hace algunas semanas, Milton Millas se reunió después de cuarenta años con sus ex compañeros de Jaguares en la parcela de “Pancho” Encina. “En el equipo todos éramos amigos, vivíamos para esto. Aunque alguien jugara mal, igual lo poníamos, porque era amigo y ahí está el valor de la amistad”, cuenta el periodista. En los más de 45 años de historia, varias figuras han sido parte de la gran familia de la Liga La Reina, uno de ellos es el técnico y actual presidente de la ANFP, Arturo Salah, quien en 1985 dirigió los destinos del equipo Stadio Italiano, que contaba con el actual gerente general, Luis Alcaide. Al año siguiente, como si fuera cosa del destino, llegó un dato de ventas de un terreno de 6,5 hectáreas. Esta era la oportunidad que se estaba buscando. “Hicimos 14 reuniones y muchas visitas al lugar. Había un grupo importante que no quería comprar. Construir nues- tro complejo en Huechuraba fue una verdadera epopeya. El valor era de 4.025 UF, en total unos $16.341.274, re- cuerdo bien esa cifra”, cuenta el mandamás. El proyecto parecía que no llegaría a buen puerto, pero se logró con- vencer al directorio y se compró ese predio. Con esta adquisición, el crecimiento y desarrollo de la liga fue demoledor. En 1988 ya se contaba con dos canchas en perfecto estado, al año siguiente eran cuatro y con nuevo camarines. En el 2000 se termina de construir el especta- cular Club House con el que cuenta el reducto y en la mis- ma década se instala la luz artificial a las cuatro canchas. “Las luminarias fueron un plus, se promocionó mucho la liga”, comenta el dentista. con cinco categorías para que jugadores de todas las eda- des puedan practicar este hermoso deporte: Junior, Senior, Súper Senior, Dorada y Diamante. Luis Alcaide afirma que “en un principio se jugaba solo ca- tegoría Junior, pero el tiempo hizo que esos jugadores se fueran poniendo más viejos, naciendo en 1983 la Senior. Posteriormente se fueron agregando más series. Fuimos acogiendo a las personas que no tenían dónde jugar”. Bajo los valores de la amistad, liderazgo, solidaridad, la competencia sana y el amor por el deporte esta organiza- ción busca seguir creando espacios no solo para los juga- dores, sino que para toda la familia. Ya se cuenta con una escuela de fútbol para los más chicos, pero la directiva quiere más. “Tenemos una deuda ahí, debemos crear más cosas que sean atractivas para ellos. Hemos hecho harto, pero queremos seguir creciendo”, sostiene Farfán. Como sea, todo lo vivido en aquellas canchas de Hue- churaba termina siendo algo mágico. El niño sueña con pisar el campo y hacer un gol, el jugador espera siempre el fin de semana para salir a la cancha y los que ya están retirados darían lo que fuera por volver a esos tiempos de alegría, así lo siente Milton Millas: “Si pudiera revivir una parte de mi vida, sería volver a la liga, ser joven de nuevo para poder jugar y sentir el olor a pasto. A mis 70 años puedo decir que en la Liga La Reina viví los mejores momentos de vida”. L A CON T INU AC I Ó N D E L L E G A D O Hoy, la Liga La Reina puede decir que es una de las más grandes de la Región Metropolitana, cuenta con más de mil socios y con un futuro alentador. Cuatro canchas de calidad con potente iluminación, camarines remodelados y 6,5 hectáreas, la hacen única. A todo esto, debemos agregar que actualmente se cuenta