Philosophically Speaking: Annals of the International Philosophy Grou Philosophical-Annals-I-2016 | Page 30
ANTI-TEO Vivir, pensar y saber en la realidad
exactamente estos procesos, pero sí siguen métodos semejantes, basados en la investigación,
la contrastación y la verificación. Se parte de la idea de que existe un mundo externo diferente
de nuestra percepción; que este mundo es comprensible racionalmente; que hay regularidades
en la naturaleza; que ese mundo se puede estudiar por partes; que el mundo se puede describir
con ayudas de las matemáticas; y que estos supuestos son universales 26 . En nuestros días, la
suma de estos métodos se consideran los más adecuados para el consenso del conocimiento,
el esfuerzo racional de adquirir y compartir el saber. Sin embargo, la teología se resiste a
someterse a medios semejantes, reduciéndose a una interiorización obscecada en sí misma,
proclamar dogmas como verdad revelada y establecer unilateralmente premisas muy
discutibles.
El ateísmo parte del mundo en el que nos desenvolvemos, percibimos y actuamos. Un
mundo material, constituido por elementos que pueden ser estudiados, percibidos y
comprobados por los seres vivos, entre ellos los humanos. Este mundo está demostrado, está
comprobado, está verificado, y es vivido día tras día. Negarlo solo puede partir de teorías
extrafalarias basadas en el irracionalismo y en un relativismo abstracto radical que ya fue
humillado por Sokal en su famosa broma 27 . En contraste al mundo material, natural, tenemos
el mundo de las religiones, abstracto y constituido por lo sobrenatural, por encima de las leyes
que conocemos y que vivimos día a día. Un mundo no solo diferente, sino por encima del
nuestro en todos los sentidos.
La descripción de los átomos no es reciente. Ya, a su manera, los antiguos griegos, en
especial Demócrito y la escuela atomista, hablaron de la unidad material indivisible, que
constituye la base física de la realidad. Creían que todo lo real venía del átomo, de algún tipo
de materia. La física, en los últimos siglos, han confirmado la esencia de su pensamiento,
26
27
Antonio López Campillo y Juan Ignacio Ferreras: Curso acelerado de ateísmo. Ed. Vosa, 1999, p. 74.
Alan Sokal, eminente físico, envió un artículo a una revista académica muy representativa de la filosofía
relativista del siglo XX, que decidió publicarlo a pesar de sus evidentes absurdos. La pose, parte fundamental
de un negocio literario vigente, determinó más que el buen sentido de los responsables de la revista, sin duda
muy inteligentes. Para más detalles aconsejamos la lectura de Imposturas intelectuales escrito por el propio
Alan Sokal y Jean Bricmon (Ed. Paidós, 2008).
30