ANTI-TEO Vivir, pensar y saber en la realidad
como forma de adaptar el mundo a ellos y no ellos al mundo. Antropocentrizar, se trata de hacer un mundo antropocéntrico. Y más aún: con unas características culturales. Dios pasa a ser, a menudo, una entidad“ nacional”, de identificación entre distintos grupos humanos o dentro de un grupo, enfrentado a otros pueblos, siempre con sus dioses. Solo así se puede entender una Biblia monoteísta que habla de dioses de otros pueblos como una especie de competencia.
Todos estos factores siguen un proceso histórico según el desarrollo de la sociedad. No todos los grupos humanos siguieron este camino, pero la mayoría de los que conocemos o tuvieron una relevancia histórica o arqueológica, así ha sido. Es un proceso histórico que sigue algunas pautas y lógicas, que no se basa en la realidad de sus creencias, sino más bien en las necesidades de esas sociedades. Aunque algo general, en cada grupo humano hubo pautas distintas: politeísmos tolerantes, politeísmos intolerantes que derivarán hacia el monoteísmo, filosofías no deístas pero sobrenaturales, animismos, la adoración del sol, la adoración a la naturaleza en general, etc. Formas distintas que normalmente se corresponden a las diferentes realidades de los grupos humanos: la adoración al sol en sociedades agrarias; la adoración a la naturaleza en sociedades recolectoras; monoteísmo o politeísmo intolerante en sociedades competitivas y / o nacionalizadas; filosofías fantásticas en sociedades de cultura compleja y articulación desarrollada; dioses que exigen sacrificios en sociedades ganaderas; y muchos otros ejemplos más, que muestran claramente que los dioses o dios es obra del ser humano, y no al revés. Por ello mismo, normalmente Dios es notablemente antropomorfo y con características humanas.
Excelentes ejemplos son la religión griega donde los dioses compartían los vicios humanos como los celos, la violación, el odio o el amor; como la religión monoteísta de raíz judía, un Dios con características y forma humana, creador de los dos primeros seres humanos a su“ imagen y semejanza”, y que en el relato bíblico se comporta como un ser humano que
observa, se decepciona, siente ira, comete errores y se arrepiente. Dios es algo tan humano 26