El impacto de los deberes en los niños de primaria
Diversos estudios han analizado los efectos de los deberes en los estudiantes más jóvenes. La American Psychological Association (APA) sostiene que, en primaria, el aprendizaje debe centrarse en actividades prácticas y experiencias vivenciales más que en tareas repetitivas fuera del horario escolar. Según Harris Cooper, investigador de la Universidad de Duke y autor de un meta-análisis sobre deberes, los beneficios de los deberes son limitados antes de la secundaria. En esta etapa, los niños necesitan tiempo para desarrollar habilidades sociales, explorar su creatividad y descansar.
Uno de los principales problemas asociados con los deberes en primaria es el estrés que generan. Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que el 34% de los niños entre 6 y 12 años reporta sentir ansiedad relacionada con el exceso de tareas escolares, lo que puede derivar en problemas emocionales y físicos, como dolores de cabeza o insomnio.
Educar en el siglo XXI
¿Son los deberes para casa beneficiosos en la educación primaria?
El equilibrio: la clave del aprendizaje
No se trata de eliminar completamente los deberes, sino de repensarlos. Los deberes, cuando son necesarios, deberían ser breves, significativos y adecuados a la edad de los niños. Actividades como la lectura diaria, reflexiones sobre experiencias o juegos que involucren habilidades matemáticas pueden ser más beneficiosas que ejercicios repetitivos y desconectados de la realidad.
Las familias también tienen un papel fundamental. Fomentar la curiosidad y el aprendizaje a través del juego, la conversación y la exploración es clave en esta etapa. En palabras de Ken Robinson, experto en educación: “Los niños prosperan mejor con un equilibrio entre el aprendizaje estructurado y el tiempo libre para explorar y crear”.