Pequeñas Historias
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Me llamo gloria:
Vivo al norte de España en una villa en las laderas de la montaña Palentina llamada Guardo.
A mis 60 años son muchas las pequeñas Historias que podría contaros, pero sin embargo me voy a centrar en una que recuerdo con bastante precisión. Por aquél entonces mi segundo hijo se encontraba haciendo el servicio militar en el “tercio gran capitán de la legión”en el acuartelamiento de Melilla.
Os aseguro que hasta me sentía orgullosa de mi hijo por que era legionario (siempre pensé que eran los más duros del ejército).Desde que se había incorporado al cuartel todo era perfecto, El escribía a menudo y me contaba…hicimos maniobras, me tocó guardia anoche, el sargento es un hueso, esas cosas que a una madre le gusta saber aunque sean repetitivas. Yole mandaba algunas pesetas para que” fuera tirando” y esperaba sus cartas con impaciencia.
Andábamos ya cerca de las navidades. Irán e Irak estaban en guerra y las noticias de la misma cada día eran peores. Esa guerra… pensaba yo y me quedaba como un ramalazo de alerta, hasta que un día, escuche que España mandaría “apoyo logístico” y ahí salto la chispa y comenzó mi desazón.
Empecé a llamar al cuartel para saber si les mandaban a ellos. No tenían órdenes pero estaban preparados (me decía el oficial de guardia). Mi hijo me contó que les